El corredor entrerriano se prepara para afrontar una nueva fecha de Turismo Carretera en Rafaela, donde irá por la consolidación del liderazgo del mini torneo, en busca del tricampeonato en la máxima categoría del automovilismo nacional.
El domingo se corre la fecha número 13 de la temporada del Turismo Carretera en el autódromo de Rafaela, la segunda en la temporada tras el exitoso paso en julio que selló una nueva Carrera de los Millones ganada por Santiago Mangoni y Chevrolet.
La Copa de Oro tiene como líder al paranaense Mariano Werner con 102,5 puntos y dos carreras ganadas en su haber (obligación para obtener el título es, al menos, tener un primer puesto en la temporada). Lo sigue muy de cerca Julián Santero con 97 unidades y dos carreras ganadas.
Mariano palpitó lo que será la competencia en el autódromo de Rafaela. «Esta gira de la Copa de Oro no es nada menor porque otra vez estamos en la pelea. Estamos primeros en la competencia pero quedan tres carreras muy complicadas», comenzó Werner.
«Llegamos bien a los dos campeonatos. Con chances en ambos frentes. Si bien hemos estado en la punta del campeonato durante todo el torneo, lo más importante se viene ahora. Quedan muchos puntos por delante», siguió el Zorro.
«Vamos a dejar todo por ese objetivo, por esa gloria», sentenció el oriundo de Paraná. La Copa de Oro se instaló en el Turismo Carretera como algo novedoso. Mariano Werner opinó sobre este trofeo: «No es un formato diferente a años anteriores».
A su vez, el referente explicó: «Porque en el campeonato general estamos todos peleando allá arriba. El Turismo Carretera está cada vez más difícil. La competencia está cada vez más competitiva. Los pilotos, los autos, los equipos y las marcas son cada vez mejores».
«Hoy hay muchos pilotos nuevos que llegan con mucho conocimiento gracias al TC Pista Moura, TC Pista, entre otras categorías. Llegan con muchísimas carreras y experiencia en sus espaldas pese a ser jóvenes de edad», agregó Werner.
«Siempre digo que me gusta competir contra los mejores porque eleva la vara y el profesionalismo», dijo, haciendo referencia a la nueva camada de pilotos que llega al TC.
Son cinco puntos los que separan a Werner de Santero en la lucha por la Copa de Oro. Algo similar a un «mano a mano» entre estos dos pilotos. «La realidad es que quedan 160 puntos, más o menos, en competencia. Es un montón. Entiendo que cinco puntos es mucho y a la vez es nada porque por eso o mucho menos define un campeonato», sentenció el piloto paranaense.
«Queda mucho por delante, muchas carreras y mucha exigencia. Rafaela mismo requiere de exigencia para el auto, para el motor, para el equipo y la aerodinámica», sostuvo.
El Zorro es un referente dentro del automovilismo argentino. En los últimos tres años consiguió un bicampeonato y el segundo lugar en la temporada pasada. Y ahora va por más. «La experiencia no sé si prevalece en el sprint final. Lo que sí me parece es que te da un poco de soltura y tranquilidad a la hora de manifestarlo con el equipo. Transmitir esa calma en momentos claves. De igual manera tengo las mismas ganas de ganar que cuando no tenía ningún campeonato», contestó.
«La adrenalina es exactamente la misma. Creo que el compromiso es aún mayor porque cuando uno va creciendo necesita entrenar un poquito más. Eso está bueno», agregó Mariano Werner.
En relación a esa adrenalina y el deseo de triunfar en cada carrera, el Zorro expresó lo que siente cada vez que cruza la bandera a cuadros: «Es lo más lindo que le puede ocurrir a un piloto», sentenció en charla con La Red Paraná. «Ese momento queda grabado en la retina de cada piloto. Siento esa adrenalina, esa pasión, esa garra de saber que lo vivo como el primer triunfo», agregó.
«Tengo dos rivales que son muy duros. Matías Rossi y Agusín Canapino. Si bien son muy distintos entre ellos, siempre los considero para mí un espejo en muchas cosas. Para uno mejorar por ejemplo. Me han llevado a estudiarlos, a trabajar de más para ganarles», dejó en claro.