Coincidieron en un restaurante, a pocas mesas de distancia.
Wanda Nara, Maxi López y Mauro Icardi cenaron en el mismo restaurante, a apenas unas pocas mesas de distancia, y no volaron los platos ni hubo ninguna pelea.
El insólito encuentro se dio luego del partido en el que se enfrentaron el Inter y el Catania, al que Wanda concurrió con sus hijos para alentar a su actual novio.
Maxi aceptó cenar junto a su ex para poder compartir la mesa con sus hijos, y de acuerdo a algunos testigos, la modelo no paró de besarse y hacerse arrumacos con su nuevo amor, a poca distancia del padre de sus hijos.
A pesar de que el partido era esperado con mucha expectativa por el morbo que significaba ver a los dos futbolistas frente a frente en el campo de juego, ambos jugadores vieron el 0 a 0 de sus equipos desde el banco de suplentes. Una pena.