En distintos sectores de la ciudad se observan veredas obstruidas que impiden la normal circulación de los peatones y usualmente esto se debe a que se deposita basura, ramas y en muchos casos no se cortan los pastos, además del gran fenómeno de la construcción que en más de una ocasión obliga al caminante a transitar unos metros por la calle.
La imagen ilustrativa es de calle 3 de Febrero, entre Henry y Lucilo López, donde el paso de los peatones se ve dificultado. La responsabilidad es de los vecinos que no contribuyen a la limpieza de la ciudad y que deberían ser más ciudadanos en el mantenimiento de sus veredas para el normal desenvolvimiento del peatón.