La medida abarca el transporte de corta, mediana y larga distancia en todo el territorio provincial.
La Unión Tranviarios Automotor confirmó este lunes su adhesión al paro nacional convocado para el próximo 25. Si bien las dos CTA convocaron a un paro de 36 horas iniciado el lunes 24 a partir de las 12, desde la CGT sólo se plegarán a la medida a partir del martes. El secretario General de la Unión Tranviaria Automotor (UTA) Entre Ríos, José Rodríguez señaló que no habrá servicio de colectivos de corta, mediana y larga distancia desde las 00 del martes 25 hasta la medianoche en toda la provincia e indicó que la medida de fuerza se sentirá de manera contundente en todo el territorio provincial. Si bien el servicio se verá afectado sólo el martes 25, «los compañeros estaremos acompañando a aquellos gremios que se manifiesten el 24», aunque «aún no está definida la modalidad», señaló. Los gremios del transporte público, vitales para la contundencia de un paro nacional, confirmaron su adhesión a la medida convocada por la CGT para el 25 a pesar de algunos intentos del Gobierno por disuadirlos. Fue a instancias de un acuerdo sellado la semana pasada entre los colectiveros de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) y los maquinistas de trenes de La Fraternidad, que funcionan en tándem en casi todas las instancias deliberativas de la central. Cuando promediaba la semana pasada hubo contactos entre Omar Maturano, jefe de los maquinistas, y Roberto Fernández y Mario Caligari, números uno y dos de la UTA, respectivamente. Los dirigentes, que conocen al detalle el carácter estratégico de sus sindicatos y el antecedente de diciembre pasado, mantuvieron hasta ahora el misterio sobre su determinación final y recién al finalizar la semana le hicieron saber a este diario que serán activos en la huelga y que lo darán a conocer formalmente como adhesión, publicó Ámbito Web. Antes de la ratificación al menos tres funcionarios de primera línea habían desplegado intentos por seducir a los gremialistas. El más activo fue el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, que llamó en varias ocasiones a Fernández y a Maturano con argumentos que iban desde la necesidad de apuntalar al Gobierno en un momento de debilidad política hasta la inminencia del debate por la reapertura de sus respectivas paritarias, cerradas en la primera etapa del año con aumentos en el rango oficial del 15 por ciento. También hubo llamadas telefónicas del ministro del Interior, Rogelio Frigerio, y del ahora secretario de Trabajo, Jorge Triaca, en todos los casos infructuosas. La huelga, sin embargo, tendrá carácter oficial recién este jueves, una vez confirmada por el Consejo Directivo de la CGT, que se reunirá a las 15. Es que su convocatoria corrió por cuenta de un plenario de secretarios generales que tiene carácter consultivo pero no resolutivo. El lunes pasado, en una reunión en el gremio estatal UPCN, la mesa chica de la CGT (con el triunvirato y representantes de grupos como los «gordos», los «independientes» y los exaliados de Hugo Moyano) confirmó que el paro será el 25 y por 24 horas, frente a algunos planteos por adelantarlo e incluso adicionarle una protesta callejera.