El velatorio en Ezeiza, con presencia de Messi y Blatter, finalizó a las 11.15 y luego, el cuerpo fue trasladado a su morada final. Allí sólo pueden entrar familiares y amigos. Galería de fotos.
Los restos de Julio Grondona fueron inhumados hoy en el cementerio de Avellaneda luego de ser velados durante casi 40 horas en el predio de la AFA en Ezeiza y de recibir el último adiós por parte de decenas de personalidades del ámbito deportivo y político.
El capitán del seleccionado argentino, el rosarino Lionel Messi, y el presidente de la FIFA, el suizo Joseph Blatter, fueron las figuras que llegaron hoy exclusivamente al país para despedir a quien presidió la AFA durante los últimos 35 años.
El cuerpo de Grondona, también vicepresidente de la FIFA hasta su fallecimiento, ocurrido el miércoles a causa de una afección cardíaca, descansará en una bóveda junto al de su esposa, Nélida Pariani, fallecida el 16 de junio de 2012.
El cortejo fúnebre que trasladó los restos de Grondona, formado por automóviles, motocicletas de la policía bonaerense y autobombas con decenas de coronas, tardó aproximadamente una hora y media en llegar desde Ezeiza hasta el cementerio de Avellaneda, y finalmente no pasó por el estadio de Arsenal de Sarandí ni por la puerta de la sede de la AFA, en la calle Viamonte de esta ciudad.
Mientras fue velado en la Capilla Ardiente montada en la cancha de futsal del predio de la AFA, se acercaron a despedir a Grondona, entre otros, la presidenta de la Nación, Cristina Fernández, junto a varios funcionarios de primera línea del Gobierno, el jueves por la noche; el coordinador de selecciones nacionales, Carlos Bilardo; y el presidente de la Conmebol, el uruguayo Eugenio Figueredo.
También pasaron por allí a dar sus respetos y condolencias varios jugadores del seleccionado argentino y el entrenador Alejandro Sabella, quien el miércoles suspendió la conferencia de prensa en la que iba a anunciar que dejaba su cargo en el representativo nacional.
En el cementerio de Avellaneda, la ceremonia de despedida fue algo más íntima que en Ezeiza, y sólo participaron las personas más allegadas a Grondona, ya que se impidió el ingreso al público en general.
Fuente: DyN