Ocurrió en Plaza Ramírez cuando un hombre que no sabía manejar tomó el volante del rodado para estacionarlo en otro lugar y por poco no causó una tragedia. La soleada mañana de ayer en el centro de la ciudad se vio sacudida cuando un camión subió a gran velocidad la vereda del Bersa Plaza, ubicado en Galarza y 25 de Mayo, hizo añicos una cabina telefónica
y aplastó una bicicleta y las barandas de la rampa para discapacitados que está en el frente del banco. Solo por fortuna ningún peatón pasaba en ese momento por allí, ya que no hubiese tenido chance de escapar del terrible golpe. El violento hecho se originó por una simple falta de tránsito ocurrida alrededor de las 9.30 cuando el conductor de un camión Mercedes Benz, patente EKN 131, perteneciente a una empresa de lácteos de la Localidad de Diamante, dejó estacionado el rodado en doble fila frente al Nuevo Banco de Entre Ríos. El chofer, mas tarde identificado como Oscar Espejo de 53 años, ingresó al banco para realizar un trámite, dejando en la cabina del camión a su acompañante.
Momentos después llegó hasta el lugar un agente que le indicó a la persona que se encontraba en el camión que debía estacionar correctamente el rodado. El hombre se habría molestado ante la insistencia del agente de tránsito y decidió ponerse al volante acelerando bruscamente el rodado. Lo que nadie sabía hasta el momento era que el hombre que estaba al mando del camión no sabía manejar. El camión se salió de control y subió bruscamente a la vereda destruyendo todo a su paso: una cabina de teléfono, las barandas del acceso para personas discapacitadas y una bicicleta que estaba atada con candado a dichas barandas. El accidente causó gran revuelo en la zona, que a esa hora era transitada por cientos de personas, ninguna de las cuales resultó herida. Al lugar llegaron más efectivos de Tránsito de la Municipalidad que constataron los daños provocados, labrando las actuaciones correspondientes. Asimismo comprobaron que quien manejaba el rodado al momento del accidente no estaba habilitado para conducir, por lo que se le labró un acta de infracción.