Agentes especializados de la Aduana – AFIP llevaron a cabo una serie de allanamientos en Villa Elisa y Concepción del Uruguay que resultaron en el secuestro de mercadería de origen extranjero valuada en aproximadamente 50 millones de pesos.
El juez Federal de Concepción del Uruguay, Pablo Seró, ordenó los operativos en las localidades entrerrianas, que se llevaron a cabo con la colaboración de la Gendarmería Nacional. El objetivo fue verificar que los productos que estaban a la venta en locales comerciales hubieran ingresado al territorio aduanero de manera legítima.
Cuando los agentes del organismo que dirige Guillermo Michel requirieron la documentación que avalara que la mercadería de origen extranjero había sido importada en forma debida, sólo recibieron evasivas de parte de los locales, que eventualmente se vieron obligados a reconocer que no tenían tales certificaciones en su poder.
En ese marco, la Aduana secuestró 188 termos Stanley, una centena de teléfonos celulares de alta gama (85 iPhones y 14 Xiaomi), 12 relojes inteligentes, auriculares y accesorios del rubro electrónica en los términos del artículo 987 del Código Aduanero. Asimismo, también incautó 2 millones de pesos en efectivo, ya que los locales tampoco pudieron demostrar el origen de esos fondos.
“Acciones como estas son fundamentales para proteger a los comerciantes que trabajan en regla y pagan todos sus impuestos. Debemos cuidar la transparencia del comercio exterior para asegurar el orden económico y darles previsibilidad a los ciudadanos, a las familias, a los comerciantes y a trabajadores», indicó Michel.
La Aduana elevó los resultados del procedimiento al Juzgado Federal de Concepción del Uruguay. En tanto, según indica la normativa, podría aplicar multas de hasta $250 millones.