San Pantaleón, mártir Era un famoso médico de la escuela de la corte imperial de Nicomedia, en el Asia Menor. Convertido al cristianismo no tardó en convertir también a su familia y a muchos gentiles a quienes asistía como médico. Se cuenta en las crónicas de su vida que en una ocasión, para demostrar el poder de Cristo, en su nombre resucitó a un niño que había sido mordido por una víbora ponzoñosa. Por mandato del emperador Maximiano, fue decapitado el año 303.
Los médicos lo honran, después de San Lucas, como su patrono. San Celestino I, papa Nació en Campania, Italia. Durante los diez años de su pontificado mostró gran energía contra los brotes de herejías de su época, particularmente el pelagianismo y el nestorianismo. En el año 430 reunió en Roma un sínodo que fue una especie de preludio del Concilio Ecuménico de Efeso. San Agustín profesaba gran veneración y cariño a San Celestino. Este papa fue el primero que envió un misionero de Roma para sostener la fe de los irlandeses, inmediatamente antes de que San Patricio empezara su gran obra de evangelización. Murió el 27 de julio del año 432.