Los equipos argentinos siguen siendo destinos muy buscados por los futbolistas sudamericanos.
La sustitución de importaciones todavía no llegó al fútbol. Los jugadores que no se pueden fabricar acá se compran afuera. Esa es la tendencia. En este mercado de pases, por ejemplo, los dos equipos más grandes apuntan a reforzarse con extranjeros. Más precisamente, con uruguayos: River sigue interesado en Tabaré Viudez, mientras que Boca esta semana contrató al defensor Alexis Rolín e Independiente pretende al volante Diego Rodríguez. Si hay poca materia prima, se importa.
La gran cantera más allá de las fronteras es Uruguay. En el último torneo de Primera División participaron 53 jugadores extranjeros, y casi la mitad nació del otro lado del Río de la Plata. Veinticuatro orientales convirtieron a Uruguay en el país que más jugadores aportó a este torneo. El segundo que más representantes tuvo fue Paraguay, con 13 futbolistas nacidos allí más uno nacionalizado, el volante de San Lorenzo, Néstor Ortigoza.
El único equipo con un plantel conformado solamente con jugadores argentinos fue Independiente. En contraposición, el que más extranjeros tuvo fue el Arsenal de Sarandí: el club fundado por el fallecido presidente de la AFA, Julio Grondona, contó con cinco integrantes de otros países.
En los goles también se notó la presencia foránea. De los 491 goles que hubo en el último torneo, 95 fueron anotados por extranjeros. Es decir que casi en el 20% de las veces que la pelota terminó en la red, fue impulsada por jugadores nacidos en otros países.
La mayoría de los futbolistas de otros países que hasta el año pasado se desempeñaron en la mayor categoría del fútbol argentino es de Sudamérica, aunque hubo dos provenientes de Centroamérica. La lista es la siguiente: 24 uruguayos, 13 paraguayos y un argentino nacionalizado paraguayo, nueve colombianos, tres ecuatorianos, un chileno, un hondureño y un panameño. No hay jugadores de otro continente que no sea América, a excepción del delantero de River Giovanni Simeone, nacido en España y nacionalizado argentino.
De estos extranjeros, cinco estuvieron en el último mundial: los colombianos Teófilo Gutiérrez y Eder Alvarez Balanta, el ecuatoriano Jaime Ayoví, el chileno José Pedro Fuenzalida y el hondureño Jerry Bengtson. Hay otros tres jugadores que no estuvieron en Brasil, pero sí participaron de Sudáfrica 2010: Alvaro Fernández y Sebastián Washington Abreu jugaron ese Mundial para Uruguay, donde obtuvieron el cuarto puesto, y Néstor Ortigoza integró el seleccionado paraguayo. En Sudáfrica el conjunto guaraní hizo una gran campaña de la mano del actual entrenador del seleccionado argentino, Gerardo Martino, y fue eliminado en cuartos de final por España, que luego se consagraría campeón mundial.
Goles con aroma a café. A la hora de buscar goles para ese campeonato, los equipos argentinos pensaron en Colombia. Los jugadores cafeteros que participaron en el torneo pasado sumaron nueve, y seis eran delanteros. Dos son hijos de glorias del fútbol colombiano que fueron parte del equipo que venció a la selección nacional en la histórica goleada por 5 a 0 en el Monumental en el 93. El delantero de Tigre Sebastián Rincón es hijo del polifuncional volante Freddy Rincón, que marcó dos goles en aquella goleada inolvidable, y el delantero de Rosario Central José Adolfo Valencia es hijo del delantero Adolfo Tren Valencia, el autor del quinto gol de esa tarde que a esa altura ya se había transformado en noche.
Pensando en fortalecer defensas, los uruguayos fueron los más elegidos para ese torneo. De los quince defensores extranjeros, ocho son nacidos allí y los únicos dos arqueros del campeonato que no son argentinos son charrúas. En relación con la experiencia, también hay una fuerte presencia oriental. A excepción de los dos paraguayos de Banfield, José Devaca (32) y Santiago Salcedo (33), los demás jugadores que superan los treinta años son uruguayos: Sebastián Washington Abreu, de Rosario Central (38); Omar Pouso, de Gimnasia de La Plata (34); Esteban Conde, de Atlético Rafaela (31); Jorge Curbelo, de Godoy Cruz (32); Sebastián Martínez Aguirre, de Quilmes (31); Santiago Silva, de Lanús (33), y Juan Andrés Tejera, de Defensa y Justicia (31).