Sargento de policía asesinó a su pareja adolescente

Tras una discusión el único imputado como autor del crimen le disparó con su arma reglamentaria a su joven pareja de tan sólo 15 años con quien tenía un hijo de un año. Un sangriento hecho ocurrió el domingo pasado el mediodía en la ciudad de Concordia, cuando Mariana Jackeline Romero, de tan solo 15 años, perdió la vida de un disparo en su cabeza. Como único imputado y posible autor fue señalado por la justicia el sargento de Policía Fabián Casas (40

años), actual pareja de la víctima, con la que convivían en una vivienda de cortada en cercanías de calle Leguizamón y las vías del ferrocarril, sobre la zona sur de la ciudad. Ambos son padres de un nene de 1 año. Los fiscales Guerrero y Dri secuestraron el arma reglamentaria de 9 milímetros, al mismo tiempo que se realizó un dermotest sobre las manos de Casas. La información señala que Romero falleció minutos antes de la 1 del mediodía, producto de un disparo en el lado derecho de su cabeza. Las entrevistas con los vecinos indicaron a los investigadores que la pareja tenía problemas de convivencia. Fuentes policiales desestimaron que se tratara de un suicidio y explicaron que minutos después del disparo Casas fue trasladado a la Comisaría Primera en estado de shock, para luego ser trasladado hacia la celda en la Jefatura de Policía, lugar donde trabaja como Sargento en la sección de Infantería. Los fiscales tomaron nota de los testimonios de los vecinos y familiares, además de tomar pruebas en la vivienda que ayudarán a la investigación. Los peritos evaluarán la dirección del proyectil, además de los restos de pólvora en Casas, a la hora de mantener la imputación.

Detalles del horror
La autopsia forense realizada este domingo por la tarde determinó que el tiro efectuado por Fabián Casas contra su pareja Mariana Romero (15), registra un orificio de entrada y salida en el cráneo. Las pericias confirmadas a Diario Río Uruguay determinaron que el disparo fue a corta distancia, no superando el medio metro de distancia entre el arma reglamentaria del sargento y la cabeza de la víctima. Según los entendidos, la marca que dejó la cercanía del orificio evidenció el corto trayecto. Los detalles que se conocieron este lunes sobre el sangriento hecho en la zona sur revelaron la presencia de un testigo clave, como es el hermano de la víctima. En ese sentido, fuentes judiciales indicaron que en la discusión previa entre Casas y Romero, la adolescente permanecía sentada en una silla con su hijo en brazos. En ese marco el sargento comenzó a amenazarla con el arma, y fue el hermano de la mujer quien levantó al pequeño niño y buscó llevárselo, momento clave que fue aprovechado por Casas, que apretó el gatillo a centímetros de su mujer, que no pudo defenderse.