Con un millar de hinchas dándole aliento en el aeropuerto de Ezeiza, el plantel de San Lorenzo viajó ayer rumbo a Marruecos para jugar por primera vez en su historia el Mundial de Clubes, en el que podría chocar en una eventual final con el poderoso Real Madrid.
Los jugadores se entrenaron en forma liviana ayer por la mañana bajo las órdenes del director técnico, y luego del almuerzo emprendieron rumbo a Ezeiza, donde evidenciaron sorpresa por la gran cantidad de gente que los aguardaba, a quienes agradecieron con gestos desde el interior del micro.
«Ya se empieza a vivir algo que realmente es emocionante. Es muy lindo», declaró el entrenador Edgardo Bauza en Radio América minutos antes de embarcar. El debut de San Lorenzo en el torneo será el próximo miércoles ante el ganador del enfrentamiento entre el neocelandés Auckland City, campeón de Oceanía, y el argelino ES Sétif, campeón africano, que será el sábado.