Trabajadores habían pedido el 35%, pero terminaron acordando más cerca de las expectativas del Gobierno. Recordaron que perdieron 1.200 empleos desde 2009.
La paritaria del sector frigorífico cerró en un 30 por ciento de recomposición salarial, que se pagará en tres tramos, lo que presiona sobre los valores de la carne en el mostrador. Ayer, las cinco cámaras empresarias incluidas en la negociación acordaron la recomposición con el Sindicato de la Carne, el más numeroso, que comanda Alberto Fantini. Empresarios del sector indicaron que continuaban las negociaciones con Sindicato de la Carne de Capital y Gran Buenos Aires, que comanda Segundo Molina, con el que se habría cerrado el porcentaje, pero no las cuotas, según pudo saber este diario.
El salario básico de un trabajador pasará así de $ 6.400 para quienes recién se inician a poco más de $ 8.300, según explicó Fantini. «Es un buen acuerdo, siendo que la industria está destrozada», sentenció Fantini y agregó que el aumento se hará efectivo en tres tramos, del 14% en abril, el 8% en julio y 8% en diciembre. Además, habrá una suma complementaria de $1.300 a pagar en cuatro tramos, comprendidos en el período de diciembre de 2014 a marzo de 2015 y un aumento del 30% en el ítem de presentismo.
Pese a que el Sindicato de la Carne se adhirió al paro general del 10 de abril convocado por los gremios opositores al Gobierno, cerró un acuerdo en línea con las expectativas del gobierno nacional y en torno de los montos acordados con los sindicatos cercanos al oficialismo. A través de un comunicado, la organización sindical destacó que no olvida que «lleva sobre sus espaldas más de 12.000 puestos de trabajo perdidos desde 2009». Desde entonces, la producción de carne cayó más de 15%, mermaron más de 50% las exportaciones y buena parte del consumo se trasladó al mercado local, con una fuerte suba en los precios, de la mano, también, de la depreciación del peso.