En la apertura de sesiones ordinarias Rogelio Frigerio evitó confrontar con el gobierno nacional y enfatizó en la herencia local. Anunció ley de Ética Pública.
El gobernador Rogelio Frigerio encabezó este jueves en el Centro Provincial de Convenciones de Paraná la apertura del 145° períodos de sesiones ordinarias de la Legislatura de la provincia, con un mensaje a la Asamblea Legislativa compuesta por 34 diputados y 17 senadores departamentales, y ante autoridades de los tres poderes del Estado entrerriano, así como referentes de entidades empresarias, civiles, sindicales y eclesiásticas.
Fue la primera apertura del período legislativo entrerriano en más de 20 años encabezada por un gobernador no peronista. En su discurso sobre el estado general de la administración pública provincial, Frigerio admitió: «Estamos viviendo un momento crítico con un contexto provincial muy delicado. No voy a mentir. Salir adelante o va a ser fácil ni inmediato».
«Cientos de miles de entrerrianos decidimos dejar atrás años de decadencia», reseñó en alusión a las elecciones del año pasado. «Estamos transitando ese camino, no sin dificultades. Empezamos a ordenar las cuentas del Estado», luego de «una Entre Ríos postergada por tantos años», destacó.
Al referirse al punto de partida de su gestión habló de «una provincia desfinanciada y endeudada, sin recursos de calidad». A esto sumó «un escenario nacional muy delicado y sin plata, como dice el Presidente (Javier Milei)». Y se alineó al plan de ajuste de Nación.
«Estamos apoyando los esfuerzos del gobierno nacional, el cambio que pidió la sociedad», aunque advirtió: «Vivimos momentos de mucha turbulencia, los argentinos no aguantan más y la política está en un estado de crispación y beligerancia. Tenemos que bajar los decibeles».
Respecto de la relación Nación-Provincia, el gobernador del PRO dijo que hay «puntos de encuentro entre las necesidades del gobierno nacional y las de las provincias» y se manifestó «dispuesto a hacer el esfuerzo» para hallarlos.
«No tiene lógica que el gobierno nacional gire fondos para pagar sueldos de empleados públicos provinciales, de subsidiar el transporte urbano o de hacer obras públicas en los municipios», definió Frigerio en uno de los tramos de su discurso que lo acercó más a los lineamientos del gobierno nacional.
Sin embargo, aclaró que «antes tenemos que reordenar recursos que le tocan a cada nivel de gobierno» y se diferenció de los recortes que viene aplicando la administración de La Libertad Avanza. «Sería más fácil quedarnos con recursos de los intendentes, pero desde la Provincia estamos dispuestos a hacer el esfuerzo con nuestros propios recursos», comparó.
El gobernador aseguró: «Estamos bajando el gasto público y saneando las cuentas provinciales que nos encontramos en rojo». Al repasar algunos números, mencionó que se vio «obligado» a tomar deuda de corto plazo. «Faltaban 40.000 millones de pesos para pagar los sueldos de diciembre en tiempo y forma: lo que teníamos alcanzaba para la mitad», precisó.
Por otro lado, se refirió a la obra pública, sobre la que indicó que analizará «caso por caso», y aseguró: «no vamos a licitar ninguna obra que no tenga el respaldo presupuestario adecuado. También afirmó que está por acordar un plan de pago de los certificados vencidos para reactivar obras». En este punto también aprovechó para marcar distancia con el presidente Milei: «Soy un defensor de la obra pública», subrayó.
Entre otras «sorpresas» que dijo encontrar al asumir, indicó que no había fondos suficientes para pagar vencimientos de deuda, y que debió tomar más deuda por 40.000 millones de pesos para afrontar cancelaciones. «Logramos desactivar la bomba y afrontar el pago de la deuda para evitar que la provincia caiga en default», se jactó Frigerio.
Al respecto, también informó que contrajo un empréstito por 80.000 millones de dólares con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para obras de saneamiento del río Uruguay y de 40.000 millones de dólares con la Corporación Andina de Fomento (CAF) para un programa de reparación de caminos rurales.
Además, afirmó que está reclamando fondos nacionales para obras públicas en la provincia ante la administración libertaria: «Vamos a emprender todas las demandas judiciales necesarias para resguardar nuestros derechos y recursos», prometió.
Al mencionar algunos ajes de su gestión, prometió «garantizar la alimentación de los niños y los adultos mayores» y trabajar para «terminar con la violencia social en general y de género en particular».
Sobre la educación, dijo que Entre Ríos se encuentra en una «pandemia educativa» y que para su gobierno el cumplimiento de los 190 días de clase al año es «una prioridad».
«La educación es una responsabilidad del gobierno provincial», definió, y evitó reclamar al gobierno de Javier Milei los fondos que cortó la Nación, como el Incentivo a la Docencia.
El mandatario adelantó que impulsará un Plan de Alfabetización y que hará evaluaciones provinciales de niveles educativos. Además, dijo que trabaja en una «transformación de la escuela secundaria» para poner a los estudiantes en contacto con el mundo del trabajo y del desarrollo.
Al hablar de seguridad, diagnosticó que el narcotráfico «se instaló en nuestras calles» y hay «robos y arrebatos» permanentes, pese que calificó a la Policía de Entre Ríos como «la mejor del país». Sin embargo, observó que hace años la fuerza se encuentra «sin recursos» por lo que llamó a asegurar «voluntad política» para priorizar recursos destinados a la prevención y combate del delito.
Leyes
El gobernador anunció que este viernes remitirá a la Legislatura un proyecto de ley de Régimen Legal de Transparencia y Ética de la Función Pública, que prevé incompatibilidades y conflictos de intereses de funcionarios públicos, así como la «Ficha Limpia» que impide que condenados por delitos graves no puedan presentarse a elecciones ni ser designados.
En materia de austeridad puso como ejemplo que está «terminando uno a uno con los privilegios de los funcionarios» como el uso personal de vehículos oficiales. «Hay vehículos que no aparecen», advirtió. «En nuestro gobierno no va a entrar nadie a la planta del Estado por ser familiar o amigo de algún funcionario», remató.
También anticipó que está trabajando en una reforma política con centro en una Boleta Única de Papel, para terminar «el robo y los negocios de boletas».
Asimismo, anticipó leyes de Ente Mixto de Turismo, de Promoción Industrial y de impulso a la Economía del Conocimiento. Otro anuncio fue la creación del Consejo Provincial de Modernización para que confluyan distintos niveles de gobierno. Y en materia de tecnología también adelantó una nueva Ley de Telecomunicaciones para favorecer inversiones del sector privado.