El santafesino Marcos Helman se perdió los últimos tres encuentros de Tomás de Rocamora a raíz de una distensión muscular que se produjo en el partido como local ante Lanús por la Conferencia Sur de la Liga Argentina de Básquetbol. Desde entonces ha trabajado en la recuperación de la lesión con la idea de volver prontamente a las canchas y estar con el resto del equipo. Mientras tanto se tomó un tiempo para hablar de esto y de la actualidad del Rojo en la competencia.
No se había cumplido el primer minuto del último cuarto ante Lanús, el pasado 3 de febrero, cuando en una acción desafortunada Marcos Helman cayó en el fondo de la cancha y quedó tendido en el parqué con visibles muestras de dolor. Rocamora le ganó a Lanús ese día 82-69 y el interno terminó siendo el más efectivo del equipo con 13 puntos, 6 rebotes y dos tapas. Luego se comprobó que sufrió una distensión muscular.
Helman se perdió la gira posterior ante Gimnasia de La Plata y el propio Lanús, y tampoco pudo estar el jueves último en la caída ante Ciclista Juninense más allá que se cambió y estuvo realizando trabajos físicos previos al juego. “Me siento bien, estamos trabajando bastante con el kinesiólogo (Goyo Etcheverry). Por ahí hay veces que molesta, pero me estoy sintiendo mucho mejor”, contó el jugador de 22 años.
Luego, agregó: “Los trabajos que estamos haciendo son básicamente de fortalecimiento para el isquiotibial y el aductor, que son las zonas lesionadas. Además, ya estamos empezando a correr un poco más fuerte”.
Respecto de cómo se sintió estando fuera del rectángulo sin sus compañeros, señaló: “Obviamente con ganas de querer estar ahí con ellos; pero bueno… desde la distancia apoyando al equipo”.
Luego, el ala pivote realizó su balance de la campaña del Rojo. “Creo que habíamos hecho una muy buena pretemporada y habíamos arrancado bastante bien el torneo, ya que éramos 10 jugadores y teníamos una rotación larga en el equipo”, comentó.
“Después, a principio de diciembre, se nos va Enzo Passadore y en el receso se van Martín Flores y Horacio Rigada. Ahí se nos suma Ignacio Galardo pero nos costó bastante volver a lo que fuimos al principio ya que cada jugador tuvo que adaptarse a la corta rotación y a la adaptación de un jugador nuevo”, reflexionó a continuación.
Y finalizó: “Últimamente veníamos medio irregulares pero hubo partidos que hicimos buen básquet como contra Deportivo Viedma y Lanús”.
Helman promedia hasta acá 7.4 puntos y 5.4 rebotes en casi 24 minutos y en los 25 encuentros que disputó. Son números muy superiores a los que tenía cuando se calzó por primera vez la pilcha del Rojo en la temporada 18-19. También estuvo en la siguiente, que se interrumpió por la pandemia. “Me siento muy bien, más que nada los últimos partidos antes de la lesión venía sintiéndome cómodo y teniendo buen ritmo en el juego”, aseguró.
Prensa Rocamora