En la intersección de Tulipanes y Gardel, en una de las nuevas 80 Viviendas entregadas el año pasado, vive una persona que se dedica a juntar chatarra y elementos de reciclaje. Esta tarea que integra la denominada “economía social” y que permite la supervivencia de esta persona, es cuestionada por la cantidad de suciedad que se genera en esa esquina, en tiempos donde el drama del dengue sobrevuela en la ciudad, con dos casos confirmados y otros dos por confirmar.
“Nosotros entendemos que se trata del trabajo de este vecino y es el ingreso económico de una familia, pero ya intentamos pedirle de muchas maneras que sea más limpio y no hay caso. En el barrio hay varias personas que se dedican al reciclaje y changarines que juntan también chatarra, pero lo hacen de manera ordenada y prolija, no dejan una mugre. El caso de esta persona es que no le importan los vecinos, ahí se juntan ratas, víboras y todos los bichos que se te ocurran”, señaló un vecino del mismo barrio, que ya intentó dialogar con el vecino, sin suerte.
“Le pedimos a las autoridades de medio ambiente que se acerquen a hablar con este hombre. Que entienda que no estamos en contra de su trabajo, pero necesitamos que entienda que vivimos en una comunidad y que nos tenemos que cuidar entre todos”.