Un grupo de vecinos del Puerto Viejo rescataron este domingo un cervatillo que se encontraba enredado en alambres de una quinta existente en el Club Racing. Se supone que el animal llegó desde la zona del balneario, indicando los vecinos que, con la crecida del río, puede haber llegado desde la Isla del Puerto o de las zonas aledañas. De porte mediana y unos 50 kilos, sus pequeños cuernos quedaron enredados en los alambres que protegen la huerta en la que trabajan maestras y alumnos de la Escuela Ponce de León, a una cuadra del lugar. Vecinos del barrio calmaron primero al animal y luego lo trasladaron hacia el balneario, en la punta del mismo, donde procedieron a liberarlo. El animal, luego que lo bajaran de la camioneta perteneciente a la Panadería Puerto Viejo, quedó inmóvil en el pasto, pero unos instantes después, se reincorporó y se alejó perdiéndose entre el espeso lugar de espinillos, chircas y pasto altos.