El preso que el domingo a la noche se escapó de la cárcel de Paraná, fue detenido en la zona del Acceso Norte. No opuso resistencia y trató de justificarse revelando por qué huyó de la cárcel de Paraná y a dónde tenía pensado ir.
En la noche de este lunes, se produjo la detención del prófugo de la cárcel de Paraná, Mario Rubén Retamal, de 37 años, quien se encontraba con prisión preventiva por una causa de violencia de género. El preso fue reingresado al penal.
En la noche del domingo el preso logró transponer los muros de seguridad de la Unidad Penal 1 de Paraná, sin ser visto por los penitenciarios.
Dado el alerta, por su peligrosidad, sobre todo con los familiares que lo habían denunciado por violencia de género, es que se emprendió la búsqueda entre personal policial y del servicio penitenciario provincial.
En la noche de este lunes, La Policía pudo obtener datos que llevaron a realizar, cerca de las 20,30 un amplio operativo rastrillaje en un predio ubicado en cercanías del Acceso Norte, en unas viviendas en construcción.
Los uniformados lograron sorprender al evadido. Retamal no opuso resistencia al verse rodeado, por lo que trató de justificar la fuga, y los motivos que llevaron a tomar la medida.
Argumentó que tenía pensado ir hasta la casa de su pareja (la que lo había denunciado) para pedirle casamiento. Es más, en el piso de tierra había dibujado un corazón con el nombre de la mujer y de Mario, por el fugado. Desde la justicia se ordenó el inmediato traslado de Retamal a la cárcel de Paraná y sería reenviado hacia otro penal como medida disciplinaria por la acción de fuga que cometió.