Tal como se informó a mediados de junio y julio, las obras comprenden de dos etapas. La segunda
inició el 1 de julio.
La obra comprende dos edificios contiguos que fueron re-funcionalizados. Uno será para la Escuela de Arte, talleres e iniciativas artísticas provinciales y municipales. El otro estará destinado al funcionamiento de dos museos, uno de ellos el Artemio Alisio, y contará con otro espacio amplio. Cabe destacar que las obras están financiadas por fondos provinciales.
Por otra parte, el segundo edificio será un espacio libre, con las características de un teatro y se prevén colocar 580 butacas. Asimismo, existe un espacio más elevado donde se distribuirán las gradas. En el ingreso del mismo estará la boletería.
Se calcula que en el escenario pueda entrar una sinfónica con todos sus instrumentos, dato que da dimensión de su extensión. Asimismo, por debajo de las tablas—como se conoce popularmente al escenario en la jerga teatral—estarán los camarines para quienes actúen en las funciones. Posteriormente, se colocará un ascensor para conectar ese lugar con la planta baja.
Por último, la idea es mantener el carácter industrial de las instalaciones de la Vieja Usina, a través del diseño. Además, los históricos tanques del predio quedarán como adornos y existe el proyecto de usarlos como reserva de agua ante potenciales incendios.