La Federación Económica de Entre Ríos (Feder) continúa aguardando una respuesta por parte del Gobierno respecto a una propuesta que presentó a funcionarios semanas atrás, que apunta a introducir modificaciones a la tributaria que rige desde enero. Lo informó el presidente de la entidad, Jorge López, quien se mostró expectante con respecto a
la posibilidad de que en los próximos días haya una contestación por parte del Ejecutivo. Consideró que la reforma instrumentada por el Gobierno es «distorsiva y regresiva» y explicó cómo afecta al comercio. «Todavía no tenemos novedades, pero esperamos que en los próximos días haya una respuesta», indicó López en relación a la propuesta que presentó la entidad que conduce y que apunta introducir modificaciones a la reforma tributaria que rige en la provincia desde el 1º de enero pasado. «Llevamos nuestra propuesta, acercamos posiciones y presentamos una serie de trabajos técnicos demostrando que lo que planteamos era viable», sostuvo.
Estimó que «posiblemente pronto haya novedades» y recordó que el Gobierno se comprometió a darles una respuesta: «Por sí o por no, pero quedaron en contestarnos». El motivo por el cual la Federación Económica quiere cambios en la tributaria es porque considera que el comercio es uno de los sectores en los que ha repercutido la reforma tributaria impulsada por el Gobierno y aprobada por la Legislatura. El rubro asegura que las modificaciones impositivas impactan negativamente en el sector. Por este motivo la Federación Económica le planteó al Ejecutivo una serie de propuestas. «Hemos mantenido varias reuniones con nuestro interlocutor en el Gobierno, que es el Ministerio de la Producción., del cual depende la Secretaría y la Dirección de Comercio Interior», indicó Jorge López. En estos encuentros la Federación Económica presentó una serie de «trabajos e informes técnicos, además de una propuesta» y ahora se encuentra a la espera de una respuesta. «Nos vinimos con el compromiso de que en estos días se nos iba a dar una respuesta, por si o por no», acotó.
A su vez destacó que la entidad se puso a «disposición para seguir discutiendo y trabajando» y fue más allá al expresar: «Venimos trabajando con la Secretaria de Comercio de la provincia en varios ítems que hacen al mejoramiento del comercio, pero con este impuestazo, que es una piedra en el camino, se nos hace imposible seguir trabajando en el resto de los temas». En los informes que la entidad presentó «se demuestra que el punto de la alícuota general del Impuesto sobre los Ingresos Brutos que se ha incrementado (del 3,5 al 4,5) no es aislado e intrascendente», dijo López, quien instó a «analizar el contexto» porque «también se subieron los impuestos para la industria, se incorporó a los Ingresos Brutos al sector primario, que antes estaba exceptuado, y al sector mayorista». «En este marco, cuando recibimos un producto, por ejemplo un kilo de pan, ya nos llega con el agregado del impuesto al sector primario, al sector industrial -que ha sido incorporado con esta reforma- y al sector mayorista. Además, le tenemos que incorporar este incremento que se nos aplicó a nosotros», manifestó.
«A nosotros, que somos el último eslabón de la cadena la cande, nos pone ante la situación de estar fuera de competencia», sostuvo, al tiempo que añadió: «Con toda esta distorsión nuestros precios pierden los valores relativos». Además, aseguró que el sector no puede absorber el incremento impositivo y lo debe inevitablemente trasladar a los precios finales, que pagan todos por igual, los que más tienen y los que menos tienen, lo cual refleja que termina siendo «regresivo». Por último, Jorge López recordó a esta Agencia que «en los dos pactos fiscales firmados oportunamente por el Estado provincial y en el programa de reordenamiento de la deuda provincial, se consideraba que la alícuota de los Ingresos Brutos es distorsiva por los motivos que planteamos -que provoca que se paga en distintas etapas. – y además es regresiva porque lo termina pagando tanto el más rico como el mas pobre».