“¿En qué se me parece Andanin? Me siento orgulloso. Tiene todo de mí: la bronca, su manera despojada de jugar… Habíamos trabajado muchas cosas, ella hasta ahora venía jugando con chicas menores que ella, que pegaban mucho menos fuerte que ella. Ahora se encontró con el primer obstáculo”, dice Vilas.
Ganador de cuatro torneos de Grand Slam y un
“¿En qué se me parece Andanin? Me siento orgulloso. Tiene todo de mí: la bronca, su manera despojada de jugar… Habíamos trabajado muchas cosas, ella hasta ahora venía jugando con chicas menores que ella, que pegaban mucho menos fuerte que ella. Ahora se encontró con el primer obstáculo”, dice Vilas.
Ganador de cuatro torneos de Grand Slam y un Masters, rememora una situación similar en el arranque de su carrera: “Yo era chiquitito, 12 años, y jugaba contra uno que me tiraba todas las bolas por arriba, me la pasé teniendo que ir a buscar las pelotas. A Andanin le pasó lo mismo que a mí”.
Por estos meses, la niña de 10 años va dando sus primeros pasos como federada de la AAT (Asociación Argentina de Tenis) en certámenes G3, y ya tiene claro que quiere ser profesional. Como es natural en una familia dedicada al tenis “7×24”, es una ávida consumidora de este deporte por televisión.
“Sobre todo le gusta ver jugar a Serena Williams y a Rafael Nadal”, señala Vilas. “Ya salió al ruedo, eso es lo importante”, agrega. Eso sí, al zurdo con vincha le salió una hija diestra.