En el marco de su visita a Buenos Aires para la despedida de Nalbandian, el español participó de una acción organizada por la Ciudad de Buenos Aires.
El número uno del tenis mundial, el español Rafael Nadal, se bañó hoy en la realidad del sur profundo de la Capital Federal, al pelotear con pibes del humilde barrio de Villa Soldati.
El modesto playón donde se improvisó lo que intentó ser algo parecido a una cancha de tenis estuvo lejos de ser una clínica sino que sobre todo sirvió para que los pibes del barrio Ramón Carrillo, y de Villa Fátima, Los Piletones y la cercana Villa 20 de Lugano, pelotearan con el mejor tenista sobre polvo de ladrillo de la historia.
En el marco de su visita a Buenos Aires para participar de la despedida de David Nalbandian y de enfrentarse el domingo ante Novak Djokovic, el gobierno porteño armó la movida en Soldati.
Allí en la plaza Carrillo estuvo Nadal con remera y pantalones cortos y también el jefe de Gobierno, Mauricio Macri, quien, vestido al estilo Wimbledon, completamente de blanco, tomó el micrófono para señalar que 4 mil chicos de bajos recursos hoy juegan al tenis por programas de su administración.
Mientras Macri hablaba, Nadal era rodeado por los chicos que querían tocarlo, o llevarse una pelota autografiada o una foto con él.
Nadal se abstuvo de hablar y luego se fue para abordar un avión rumbo a Chile y participar de una serie de eventos por el retiro del local Nicolás Massú, ex bicampeón olímpico.
El mallorquín estará de vuelta el jueves y ese día enfrentará a Nalbandian en el Orfeo de Córdoba, y el sábado en La Rural. Allí mismo, el domingo, Nadal se despedirá ante Djokovic en un duelo entre el 1 y el 2 del mundo.
Fuente: DyN