El equipo de Sergio Hernández superó al combinado africano por 94 a 81 y se garantizó un lugar en la siguiente fase del torneo que se desarrolla en China. Luis Scola fue la figura de la cancha después de convertirse en el segundo goleador histórico de los mundiales.
La enorme producción del Pato Garino, el trabajo de Gabriel Deck y el peso de la historia de Luis Scola, sirvieron para que la selección albiceleste lograra sacar una cómoda ventaja en el primer cuarto (28 a 17) y pudiera tomar un respiro, aunque esa relajación le hizo pasar un mal trago, ya que la amplia diferencia duraría poco. Durante el segundo parcial un aluvión de triples nigerianos sorprendió a una Argentina que se vio vulnerable en su juego defensivo y sin efectividad en sus incursiones en ataque. La diferencia de 26 a 15 hizo que los protagonistas se vayan al descanso con un empate en 43 que cargó de suspenso al espectáculo desarrollado en China.
En la reanudación del choque Argentina volvió a sus fuentes y el talento de Nicolás Laprovittola y la genialidad de Facundo Campazzo contribuyeron para que Luifa continúe mostrando su mejor brillo al convertirse en uno de los máximos goleadores del encuentro y de la historia de los mundiales (superó a Andrew Gaze y se instaló en el segundo escalón detrás de Oscar Schmidt). Con 23 puntos y 10 rebotes, Scola fue la figura de la jornada. Garino, Laprovittola y Deck fueron otros intérpretes que contribuyeron en el triunfo sudamericano.
Con la clasificación a la siguiente ronda garantizada, los argentinos cerrarán el Grupo B frente a Rusia el miércoles a las 9:30 (hora de Argentina), en un choque que tendrá un valor agregado: como avanzan dos equipos a la segunda fase y existe el sistema de arrastre de puntos, los de la Oveja Hernández irán por una victoria para encaminar su futuro en la Zona I, donde se medirán ante los mejores del Grupo A (China, Polonia, Venezuela o Costa de Marfil).