Varios países con mayoría de población musulmana decidieron relajar a partir de hoy las medidas impuestas para frenar la pandemia del coronavirus con el inicio del Ramadán, el mes más sagrado del calendario islámico, en el que los fieles ayunan durante el día, para luego comer y orar juntos a la noche.
Tal es el caso de Egipto, el país africano con mayor número de musulmanes, donde el gobierno retrasó una hora el inicio del toque de queda nocturno y anunció la reapertura durante los fines de semana de los pequeños comercios, aunque sólo hasta las 17 horas, reportó el portal informativo Al-Monitor.
También los restaurantes, limitados desde hace un mes al servicio a domicilio, podrán abrir para que la gente retire la comida en el local, mientras algunas oficinas administrativas reabrirán sus puertas la semana que viene.
Sin embargo, las mezquitas y lugares de culto, así como escuelas, universidades, cafés y discotecas continuarán cerrados, al igual que el tránsito aéreo internacional, suspendido mediados de marzo.
También Argelia, el país africano con más fallecidos por Covid-19, con 419, decidió reducir el horario del toque de queda nocturno en varias provincias, mientras Irak y Emiratos Árabes Unidos suavizaron el régimen de cuarentena impuesto a la población.
En Irán, donde ya abrieron todos los comercios considerados de bajo y medio riesgo, incluso los centros comerciales, las mezquitas y otros centros religiosos permanecieron cerrados por considerarse lugares de alto riesgo, al igual que cines, teatros y escuelas.
Las mezquitas sí abrieron hoy en Pakistán, donde el gobierno decidió ceder ante las fuertes presiones de los clérigos y desoír las advertencias de la comunidad médica, que teme que esta decisión acelere el ritmo de contagios.
Si bien las autoridades condicionaron la apertura de los centros religiosos a que cumplan una serie de medidas de seguridad, como que los fieles mantengan un metro de distancia, lleven sus propias alfombrillas para rezar y se laven en sus casas, la decisión generó polémica.
El inicio del Ramadán coincidió, además, con la extensión de la cuarentena en el país hasta el 9 de mayo, aunque el gobierno dijo que reducirá las restricciones solo a áreas muy afectadas y pasar así a un llamado «confinamiento inteligente» para reactivar la economía, otra medida criticada por los médicos.
En tanto, en Arabia Saudita, dos de los lugares más sagrados del islam, como la Gran Mezquita de La Meca y la del Profeta en Medina permitirán el rezo del Ramadán pero más breve y sin la presencia de fieles.
En este mes sagrado, los creyentes se abstienen de comer, beber, fumar y mantener relaciones sexuales desde el alba hasta la puesta del sol.