Durante el fin de semana, en el puesto caminero Paso Cerrito, fueron detectados dos traslados ilegales de vacunas contra la encefalomielitis equina, enfermedad que registra un brote a nivel nacional.
Uno de los hallazgos se produjo cuando los agentes inspeccionaron un Citroën C4 Lounge, conducido por un hombre oriundo de Buenos Aires, que ingresaba al territorio provincial desde el norte con dos conservadoras en el baúl, las cuales contenían 849 unidades del antídoto, sin documentación que respalde su tenencia.
En otra oportunidad, se dio con 200 dosis marca TRI-EQUI del laboratorio CEVA, de origen brasileño, que eran transportadas en una conservadora de telgopor en el baúl de un Volkswagen Polo Confortline Plus, que ingresaba a Entre Ríos al mando de una persona con domicilio en Formosa.
Al tomar intervención, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), organismo entendido en la materia, procedió al formal secuestro de las vacunas para conservar la cadena de frío hasta tanto la Aduana determine su destino.
En ambos casos, por jurisdicción, intervino el Juzgado Federal de Concordia.