El Gobierno nacional no alcanzó un acuerdo con las petroleras y se prepara para aplicar la Ley de Abastecimiento N° 20.680 de 1974 para congelar los precios de los combustibles por 90 días, tal como anunció Mauricio Macri tras la devaluación y la derrota electoral en las PASO.
Fuentes oficiales y de las compañías hidrocarburíferas confirmaron que la decisión se oficializará este viernes con la publicación de una resolución de la Secretaría de Energía a cargo de Gustavo Lopetegui. La norma ya fue firmada.
En ese sentido:
– La medida congela el precio en los surtidores en base al barril Brent a u$s59 y el dólar a $45,19, los valores del viernes 9 de agosto pasado.
– El precio del litro de nafta súper de YPF quedará establecido en $43,81 en la Ciudad de Buenos Aires hasta el 15 de noviembre próximo.
– Las fuentes consultadas por este medio aseguraron que la medida se puede «levantar» antes o extender cumplidos los tres meses.
Ahora resta saber la letra chica de resolución y si se hará alguna compensación a los productores de petróleo, algo que sería muy complicado en este momento económico y político. Las tres variables que determinan el costo del combustible en la Argentina tras la liberalización del mercado son el tipo de cambio, el Brent y los biocombustibles. En menor medida se incluyen los impuestos que se actualicen automáticamente cada tres mes.
Qué dice la Ley de Abastecimiento sancionada en 1974
La resolución apelará a la vetusta Ley de Abastecimiento, que fue sancionada por el Congreso de la Nación el 20 de junio de 1974 para controlar supuestas maniobras realizadas por industriales y empresarios del transporte de mercaderías. La norma llevará la firma de Lopetegui y el Secretario de Comercio, Ignacio Werner.
La polémica 20.680 brinda al Poder Ejecutivo la facultad de fijar precios mínimos y máximos a bienes esenciales e incluso lo autoriza a recurrir a las Fuerzas Armadas y de seguridad para restablecer la cadena de abastecimiento, ante una eventual falta de productos.
También establece la aplicación de sanciones que van desde multas hasta 4 años de prisión para aquellos empresarios que provoquen maniobras de desabastecimiento.
Algunos juristas creen que la normativa no es constitucional y por lo tanto no debe ser aplicada. La Ley de Abastecimiento fue sancionada en 1974 a instancias del por entonces ministro de Economía José Ber Gelbard, poco después de la muerte de Perón.
La ley se impulsó durante la tercera presidencia de Juan Domingo Perón para asegurar el Pacto Social acordado por el ex ministro de Economía José Ber Gelbard. En la década del 60 se utilizaron leyes similares. Isabel Perón, el gobierno de la dictadura militar y Raúl Alfonsín también la aplicaron en casos aislados. Menem la puso en práctica en julio de 1999, a través de un DNU porque antes la había derogado. La usó para impedir que un paro de las empresas transportistas provoque un desabastecimiento de productos de primera necesidad.