Rocamora salió a jugar su juego en Monte Hermoso, con su habitual presión defensiva y salir rápido de contraataque, eso le permitió estar en juego durante gran parte del mismo mientras pudo sostener la presión fisicamente. Además el equipo se fue cargando de faltas y sobre el final varios jugadores tenían 4 faltas sobre sus espaldas, lo inevitablemente derivó en jugadores fuera por faltas.
El primer parcial fue para el local apenas 23 a 18, Penachiotti y Araujo eran los abanderados en los goleos de ambos equipos, lo que se repetiría a lo largo del partido. El segundo también fue para el local por 25 a 24 que se fue arriba por 6 al descanso, gracias a Gutiérrez y Harina pero Rocamora mostró que podía estar en juego.
En el complemento, cuando Jelks convirtió sus primeros puntos. Más tarde, Rocamora aprovechó para arrimarse (66-64) con unipersonal de Araujo, aunque Harina ofreció aire a su equipo. Rápidamente, De Tomasi volvió a colocar en cancha a sus dos anchos: Pennacchiotti y Gutiérrez. Oro y Espada. Una asistencia del base al centro le otorgó al tricolor 12 de luz (76-64) a 7m16. Fue el quiebre. Porque si bien Rocamora insistió, juntando a Romero con Jelks, las ofensivas del local fluyeron hasta el final.
Mañana martes Rocamora enfrenta a Atenas de Patagones en el segundo juego de la gira.