El actor, que estuvo militando por Scioli en la Avenida Corrientes, se refirió al momento político actual de Argentina.
Leonardo Sbaraglia se movilizó a favor de Daniel Scioli, y se explayó sobre el momento político actual.
“Cuando se habla del momento actual, me retrotrae a 2000. Ese año me fui a España por ambiciones personales pero al mismo tiempo por el país. Argentina había pasado la época dura del presidente Méndez (en referencia a Menem), yo no lo nombro para no tener problemas. Las ofertas de trabajo que podía tener acá eran pura boludez, aunque se ganaba mucha guita. Pero yo tenía ganas de desarrollarme. Me fui con la sensación de un país del ‘sálvese quien pueda’“, explicó, en diálogo con El País de España.
“En 2002 fue un año muy importante porque se empezaba a ver la reacción del pueblo argentino. Veías que en una casa se abría un teatro, los trabajadores querían recuperar una fábrica. Y eso fue muy fuerte. Yo estaba en España, pero lo vivía como si estuviera en Argentina. La gente se avivó de que no iba a ser rica y por lo menos salió a hacer lo que quería. Ese proceso tiene continuidad con la asunción de Kirchner, con un 22% de los votos. Este tipo demuestra ser mucho más de centroizquierda. Recupera derechos de identidad argentina, cosas del Estado que se habían perdido, derechos humanos que estaban pendientes en Argentina, aunque Alfonsín había podido hacer mucho”, agregó el actor.
Consultado sobre por qué Mauricio Macri podría ganar las elecciones, Sbaraglia consideró que “son 12 años de gobierno en los que han pasado muchas cosas. Un sector de la sociedad argentina seguramente tiene razones para sentir cierto desgaste. Y además es difícil combatir contra grupos de medios poderosos”.
“Macri es un candidato que los medios han inventado de alguna manera. Tiene un discurso sin sustento político, parece una publicidad que está vendiendo. Aun así, con el apoyo de los medios y los grupos económicos más importantes del país, a Macri le costó muchísimos años llegar”, observó.
Además, señaló que “no se ha construido un recambio a la altura de lo que eran Néstor y Cristina. Uno que podría seguir la línea es Kicillof: es brillante, valiente, con la capacidad de sentarse enfrente de gente muy poderosa y plantársele, como con los fondos buitre”.
“Scioli fue el que tenía más posibilidades presidenciables. Vos lo escuchás ahora a Scioli en el debate y fue aprendiendo también. Como dice Alejandro Dolina, ‘puede haber peores, mejores, pero es el que tenemos ahora‘. Así como en España está Rajoy, en Francia Sarkozy y en Italia Berlusconi, Macri es eso. Scioli representa ir contra la derecha. Del otro lado está, como decía (el científico Alberto) Kornblihtt, el lobo disfrazado de cordero. No digo que del lado del kirchnerismo sean todas rosas, pero uno puede seguir luchando. Con lo otro es tirar todo a la mierda, es volver a regalarse a la economía de EE UU, al capitalismo”, manifestó.
Sin embargo, reconoció que gane quien gane vienen tiempos duros. “Aunque gane Scioli vamos a vivir momentos más delicados porque hay medidas que seguramente habrá que tomar. Pero a partir de Scioli se pueden construir de manera más humana. Para el kirchnerismo es un llamado de alerta lo que ya pasó. ¿Por qué sacó 37%? Argentina está mucho mejor, y esto no lo hizo solo el kirchnerismo, lo hicimos entre todos. La gente que vota a Macri también formó parte de este proceso para que Argentina esté mejor, hay que decirlo”, argumentó.
Por último, Sbaraglia habló sobre el gran momento de la industria audiovisual argentina. “El año pasado se hicieron más de 150 películas, en 1999 era impensable. El cine argentino está en uno de sus mejores momentos, reconocido a nivel internacional. Estamos casi todos movilizados tratando de defender de manera absolutamente espontánea y sin ningún interés el país que tenemos. Mis jefes, los tipos que me contratan seguramente son más macristas. No sé si me conviene implicarme. Pero uno lo hace porque le sale. Prácticamente un 90% de la gente de la cultura está luchando, yo no lo había visto en mi vida. Luchamos por la Argentina, no por Scioli. Estamos movilizados porque sabemos la que se nos viene. Algunos dicen ‘es que no puedo comprar lo que yo quiero, no puedo comprar el iPhone, no puedo comprar dólares’. Y es legítimo. Pero esa gente tiene que ser consciente de que no está comprando su iPhone pero quizás hay un tipo que está comiendo mejor, que ya no le duelen las tripas de hambre“, cerró.