Los incidentes se registraron en el concurrido barrio Vila Madalena tras el triunfo de Argentina sobre Suiza. Los hinchas tiraron botellas contra efectivos de la policía militar.
Los argentinos que fueron a festejar a Vila Madalena, el barrio donde se suceden los boliches y es el centro de la movida paulista, tuvieron que dejar la zona corridos por los gases lacrimógenos que lanzó la policía para dispersar luego de que algunos hinchas tiraran botellas contra efectivos de la policía militar.
Ya el alcalde de San Pablo, Fernando Haddad, había abierto la oferta nocturna a otros barrios de San Pablo para no concentrar todo en la selecta Vila Madalena, que igualmente fue elegida por la mayoría de los argentinos,para celebrar el 1-0 a Suiza y la clasificación a cuartos del Mundial. También había suizos, mexicanos y habitués los brasileños.
Si bien no hubo enfrentamientos mayores entre los hinchas, bastó que unos pocos lanzaran unas botellas cuando la policía intentó abrir paso para que operarios de limpieza pasaran con un camión para sacar cientos de botellas, latas y vasos de bebidas alcohólicas, para que los agentes acudieran a los gases.
Fue alrededor de las 2 de la mañana cuando se produjo el desbande, sin que se produjeran detenciones ni lastimados.
Ante las expectativas de que iban a llegar unos 70 mil argentinos a Brasil, Hadad buscó atomizar la oferta a otros barrios y dejar a los argentinos que no tuvieran entradas en el Sambódromo para evitar que llegasen al estadio.
Sin embargo, fueron muchos menos argentinos los que estuvieron en esta megaciudad.
Fuente: DyN