Ya se definió la fecha de convocatoria. Se evalúa establecer una suma fija de aumento salarial. Tomará como referencia una inflación proyectada del 9% para el primer trimestre y del 6% para el segundo.
El Gobierno ya definió que el 20 de enero convocará a una negociación paritaria a los docentes de todos el país para negociar un incremento salarial aunque ya adelantó al menos dos condiciones concretas: el nuevo acuerdo no contemplará una «cláusula gatillo» de ajuste automático por inflación y no habrá un bono especial como el que se le dio a los trabajadores estatales y privados por decreto.
L a decisión del
Presidente Fernández ahora es llamar a
una paritaria nacional que tendrá ciertas limitaciones por la misma situación
de fragilidad fiscal en que están las cuentas del Estado.
En este sentido, se evalúa
establecer una suma fija de aumento salarial que podrá ser refrendada
porcentualmente pero que tomará como referencia una inflación proyectada del 9%
para el primer trimestre y del 6% aproximadamente para el segundo trimestre. De
esta manera, se estima que el incremento sería del orden del 15% promedio que,
al ser una suma fija, impactará en mayor medida en los salarios más bajos que
en los más elevados de la docencia.
Por otra parte, el ministro de Educación y el jefe de Gabinete ya adelantaron a
los gremios que el Gobierno no
aceptará incluir en la paritaria una «cláusula gatillo» de indexación
automática de los salarios en
función de la inflación. Esta fue una modalidad que utilizaron el año pasado
algunos gremios docentes provinciales en función de que no había paritaria
nacional. «Los docentes deben entender también que la situación fiscal es
muy endeble y que no hay margen para aplicar cláusulas gatillo», dijo un
funcionario.
En este contexto de limitaciones fiscales en el Gobierno propondrán a los
gremios docentes que haya una
revisión de la paritaria en función de la inflación del INDEC cada 90 o 180
días. Estos plazos no están definidos y formarán parte de las
negociaciones.
Tampoco está previsto emitir un decreto como el que se les otorgó a los
empleados estatales o a los privados para
inyectar en el salario un bono especial de $4.000 a pagar en dos veces de aquí
a marzo.
Como contrapartida de esto, en el
Gobierno evalúan un eventual aumento del Fondo de Incentivo Docente que hoy de
unos 25.000 millones de pesos anuales. Se estima que de ese fondo van unos
$1.400 por docentes. Existen un millón cien mil docentes nacionales pero cada
uno de ellos tiene más de un cargo con lo cual hay 1,7 millones de cargos. En
el caso de aumentarse el fondo docente ello impactará también en lo que destina
el Estado para cada trabajador de la educación.
La pulseada por la paritaria nacional comenzará a regir el lunes 20 de enero.
Los gremios reclamaban un aumento del 20% y también deslizaron la idea de fijar
un bono especial como los estatales y privados.
De todas maneras, Baradel y buena parte de la Cetera avalan la decisión del gobierno de llamar
a una paritaria nacional por el salario. «Se recupera el rol del Estado
nacional en el sostenimiento de la educación pública, en conjunto con las
provincias», dijo el gremialista docente hace unos días. Esto muestra la
buena predisposición que hay en los gremios pese a las restricciones fiscales.
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