Policías fuertemente armados en la puerta y estricta restricción vehicular en la zona de los Tribunales de Gualeguay. Escobar Gaviria, en el banquillo de los acusados.
Juan Diego Escobar Gaviria está en el banquillo de los acusados, junto a sus defensores Milton Urrutia y Juan Pablo Temón. El religioso de origen colombiano, exponente de la Cruzada del Espíritu Santo que lidera el padre Ignacio, escuchó el requerimiento de elevación a juicio, cuando se lo puso al tanto de los delitos que se le acusan. Durante el debate, que según la agenda prevista se extenderá hasta el 28 de agosto, Escobar Gaviria oirá además los testimonios de familiares de víctimas, vecinos de la comunidad de Lucas González y las propias víctimas, entre otros. Poco antes de las 8.30 de ayer ingresaron al edificio los integrantes del Tribunal y en el exterior se apersonó un minúsculo grupo en apoyo del sacerdote, provenientes de Lucas González que con pancartas y carteles le manifiestan su acompañamiento. También se hicieron presentes víctimas y sus familiares quienes estuvieron muy cerca del otro grupo pero no hubo ningún tipo de enfrentamiento. Con una fuerte custodia policial del grupo especial de la Policía de Entre Ríos en el frente del edificio, la llegada del cura se produjo en una camioneta policial. Una de las víctimas que denunció a Escobar Gaviria y que deberá declarar este miércoles, afirmó que «se va a hacer justicia» porque «venimos con la verdad y vamos a seguir con la verdad». El juicio oral contra el cura Escobar Gaviria será a puertas cerradas. Sucede que se juzgan delitos de abuso sexual y corrupción de menores, pero con una particularidad que no se da en los otros dos expedientes que tramita la justicia: actualmente, dos de las víctimas de Escobar Gaviria son niños.