Cuando se explaya Furriel sobre actuación dice: “No para todos los viajes necesitás la misma ropa”. Lo subraya hoy enfundado en un traje oscuro que le da un aire de ejecutivo, alejado de otros personajes. “El final de Sres. Papis aún no está escrito, dependerá de los tiempos. Tenemos un contrato. Por ahora va muy bien y parecería que nos quedaremos
Cuando se explaya Furriel sobre actuación dice: “No para todos los viajes necesitás la misma ropa”. Lo subraya hoy enfundado en un traje oscuro que le da un aire de ejecutivo, alejado de otros personajes. “El final de Sres. Papis aún no está escrito, dependerá de los tiempos. Tenemos un contrato. Por ahora va muy bien y parecería que nos quedaremos todo el año, pero eso ya es futurología”. Anticipa que en próximos capítulos se conocerá al padre de su personaje -Nacho Moreno-, que será interpretado por Luis Brandoni.
Promete que desde marzo se pondrá al día con los estrenos teatrales. Debe ver a muchos colegas y amigos. Asegura que quiere “seguir haciendo cine”. Cuando se le pregunta por sus referentes aparece en la lista nacional Alcón. “Del exterior veo a actores europeos de mi generación que hacen cine y observo qué eligen en el teatro –ejemplifica-, como James McAvoy, uno de los protagonistas de El último rey de Escocia. Hace poco hizo Macbeth con dirección de Jamie Lloyd, el que mismo de Piaf.”
Cuando se le pregunta por la salud de Alfredo Alcón responde: “”Está en recuperación, pero no me siento cómodo dando el parte”. Furriel hizo varios personajes que ya había interpretado con anterioridad Alcón, como Un guapo del 900 de Eichelbaum y El reñidero de Sergio De Cecco. “Me gustaría hacer Hamlet –confiesa-. Después de interpretar La vida es sueño leí a Shakespeare de otra manera. Son obras que exigen una muy buena adaptación, dirección y elenco, sin olvidar una gran producción. Cuando miro para atrás veo trabajos que no lo puedo creer. Tuve la posibilidad de trabajar con Calixto Bieito, en la obra de Calderón de la Barca y es uno de los mejores puestistas del mundo. Todavía nos escribimos y me encantaría volver a ser dirigido por él. Hoy envidio a Paula (Krum, su ex-esposa) que está ensayando A Electra le sienta bien el luto de Eugene O´Neill con dirección de George Sturúa. Lo conocí hace muchos años en su país – Georgia- donde la política cultural es tan importante como la economía. Se discute el cambio de un director del teatro oficial como un tema de estado”.