Tras los anuncios a nivel provincial en los que el ministro de Producción Juan José Bahillo, adelantó que en los próximos días se autorizarán las actividades en gastronomía y hotelería, este martes se reunieron los representantes del sector de nuestra ciudad con funcionarios municipales, para trabajar en el delineado del protocolo a llevar adelante para la reactivación.
En diálogo con La Prensa Federal, el responsable de la Asociación que agrupa a hoteleros y gastronómicos, Fernando Vence brindó detalles del encuentro: “La reunión consistió en una primera parte en hablar cómo se encontraba el sector, en una especie de catarsis e iniciamos la etapa de comenzar a comentar cómo podríamos reactivar la actividad. Ahí abordamos un protocolo que ya veníamos trabajando con María Laura Saad (directora municipal de Turismo)”.
“Ya hemos tenido alrededor de cuatro reuniones previendo que esto en algún momento iba a llegar. No pensamos que iba a ser ahora, sino que pensábamos que sería cerca de septiembre. Pero igual nos habíamos tomado el tiempo de trabajar en esto, por lo que ya teníamos algo armado y se le dejó ya una copia a Yari Seyler del Protocolo”, agregó.
Del encuentro participaron referentes de los sectores gastronómico y hotelero, el Jefe de Gabinete, Yari Seyler, la Directora de Turismo, María Laura Saad y el Secretario de Turismo, Cultura y Deportes, Sergio Richard.
Delineamiento local
En tanto ayer, se concretó una reunión entre los sectores gastronómico y hotelero por separado para darle un alcance más local al protocolo, para finalmente hoy poder elevarlo a las autoridades municipales para que a su vez sea enviado a la provincia.
Respecto del protocolo establecido, en relación a la hotelería Fernando explicó: “Ya sabemos que la hotelería abrirá parcialmente con un protocolo muy especial porque va a trabajar con gente que ingresa de afuera de la ciudad”.
“En hotelería pesa más que no puedan trabajar para el turismo, pero trabajarán con visitadores, viajantes, la gente que anda con el tema de alimentación o salud, pero no son tantos, así que no a todos les sirve la apertura del hotel, y eso quedará en decisión de cada uno”, agregó.
Y detalló: “En hotelería está pasando otro fenómeno ya que en la hotelería la mayoría son dueños de la propiedad, les es más fácil aguantar por un lado la crisis y por otro empezar a mutar, dejando de ser el hotel tradicional y están viendo -ya que no es la primera vez que pasa y hemos tenido y seguiremos teniendo distintas crisis- de mutar los espacios para tener un ingreso fijo dividiendo una parte dedicada a la hotelería y otra a departamentos, o apart hotel. Se replanteó la forma de trabajar de la hotelería y se planteó un cambio en las formas de trabajar. Eso llevaría a perder algunos hoteles de familias hoteleras de años, y eso me parece a mí que sería una pérdida, pero hay que adaptarse a los tiempos y tratar de mutar para no morirse”.
En cuanto a la gastronomía analizó: “Y gastronómicamente tendremos las limitaciones normales que ya todos conocemos a partir del protocolo nacional implementado, que es trabajar a un 50% de la capacidad, con un distanciamiento aproximado entre cada mesa de 2 metros, un metro y medio entre espalda y espalda de las sillas de un comensal y del otro. Y después bueno en todo lo que es la limpieza e higiene tendrá que ser bastante extrema: se va a tener que trabajar posiblemente por turnos y hacer limpieza entre turno y turno”.
En otro aspecto, también Vence señaló: “Se está luchando por tener una ayuda en lo que es la parte energética, ya sea luz o gas, porque la mayoría ha amontonado varias boletas y se hace difícil pagar sin trabajar y le pedimos al municipio que nos acompañe en esta gestión y se comprometieron a hacerlo”.
Un sector duramente golpeado
Tras casi 70 días de cuarentena, los sectores gastronómico y hotelero se encuentran en la necesidad de reactivar la actividad debido a que fueron de los más golpeados por la cuarentena. Consultado por esto Vence dijo: “Son 700 familias las afectadas directamente por la pandemia en Concepción del Uruguay entre hotelería y gastronomía y después todo el trabajo indirecto que también ha dejado de trabajar y no está en cuenta”.
“Fue devastador, tanto para la hotelería como para la gastronomía. Se produjeron varios cierres definitivos. Acá en ciudad hubo tres comercios que cerraron sus puertas directamente, y a nivel regional fue impresionante. La parte anímica de los empresarios quedó destrozada”, finalizó.