La edición 65° del Gran Premio de Alemania fue presenciada por una multitud en las tribunas del circuito de Hockenheim y contó con la particularidad de la lluvia presente sobre el asfalto, que sería un valor agregado para el espectáculo, sumado a Sebastian Vettel, el representante del público local, partiendo desde el último cajón de la grilla, desde donde debía remontar con la Ferrari en búsqueda de los puestos de vanguardia. Adelante y con la misma ambición, pero más posibilidades a priori, Lewis Hamilton (Mercedes) y Max Verstappen (Red Bull) formaban la primera fila por delante de sus compañeros Valtteri Bottas (Mercedes) y Pierre Gasly (Red Bull). Sorprendía la posición retrasada de Charles Leclerc con la otra Ferrari, presente en los primeros puestos últimamente. En este caso partía desde la décima posición. En las vueltas previas (fueron cuatro) se pudo evidenciar la cantidad de agua en pista, con el abundante spray que comenzaba a levantar cada uno de los autos a su paso, hasta que se fue el auto de seguridad para permitir la largada detenida. Hamilton mantuvo la punta en la movida, pero no pasó lo mismo con Verstappen, quien tardó en mover y fue superado tanto por Bottas como por Kimi Raikkonen (Alfa Romeo). Otro que perdió varias posiciones fue Gasly, cayendo hasta el octavo puesto. Para alegría de su gente, Vettel saltó cinco lugares en la largada y dos más en las siguientes vueltas, hasta que hizo su ingreso a boxes, al igual que Kimi, para poner gomas intermedias durante la primera interrupción de la carrera por un despiste y abandono de Sergio Pérez (Racing Point). Comenzaba a formarse la huella, pero no dejaba de llover y eso complicaba las decisiones de los equipos. Con seis giros cumplidos, Leclerc se ponía a tiro de las posiciones de podio, detrás de Verstappen, mientras su compañero alemán ya se ubicaba en la séptima colocación intentando superar a Raikkonen. Cuando la mayoría decidió por los neumáticos lisos, la lluvia volvió a hacerse presente antes de ingresar al meridiano de la competencia y fue un momento crucial. Leclerc perdió el control de la Ferrari y debió abandonar cuando circulaba cuarto y el líder Hamilton, hizo lo propio en el mismo sector que el monegasco, rompiendo parte del alerón delantero y debió entrar a boxes. La parada del británico se estiró más de la cuenta y perdió varias posiciones, sumado a una penalización por ingresar al pit lane en el lado equivocado del bolardo. Max Verstappen tomó el mando a pesar de la mala largada y de haber hecho un trompo de 360° que supo controlar. Bottas escoltaba al holandés, en tanto que Hamilton ascendía rápidamente hasta la tercera posición, aunque aún debía cumplir con la penalidad. Detrás del campeón, Nico Hulkenberg realizaba una muy buena carrera con el Renault hasta que en la vuelta 41 se despistó en la curva del caos y debió abandonar. En el relanzamiento, muchos entraron a colocar gomas slics alterando todo el clasificador y más tarde lo hizo también Hamilton. La estrategia de Red Bull tuvo un buen efecto y retornó a pista como líder. Las alternativas de una carrera fuera de lo común mostraban a estas alturas a Lance Stroll (Racing Point) peleando el segundo puesto con Toro Rosso del ruso Kvyat, que se quedaría con la batalla. Con catorce giros por delante, la lluvia volvía a alterar las cosas cuando todos habían colocado gomas lisas. El Mejor Mercedes, de Bottas, giraba cuarto, mientras su compañero penaba con un trompo que lo complicaba y volvía a los pits. Vettel manejaba en la sexta posición con la única Ferrari en pista, detrás del español Carlos Saiz, que estaba realizando un muy buen trabajo con el Mc Laren. A poco para el final, Valtteri Bottas selló un mal día para la carrera 200 de Mercedes al despistarse y pegar fuertemente con la trompa contra las gomas de contención. En el cierre, Vettel fue en búsqueda del podio y superó primero a Sainz, para colocarse a la cola de Lance Stroll, a quien superó fácilmente utilizando la succión. El extraordinario final del alemán no quedaría ahí, sino que ascendería finalmente 18 puestos en total dejando atrás también a Kvyat y adueñarse del segundo escalón del podio.