De cada 100 embarcaciones que están amarradas en los nutridos clubes náuticos de Concepción del Uruguay, 60 de ellos no pagan sus impuestos provinciales, confirmaron desde la oficina de ATER de esa localidad
Concepción del Uruguay es el tercer parque náutico del país, y en ese conglomerado de embarcaciones que pueblan las aguas de ríos y arroyos de la ciudad, de cada 100 embarcaciones que están amarradas en los nutridos clubes náuticos, 60 de ellos no pagan sus impuestos provinciales, informó El Entre Ríos.
«En los operativos se detecta muchísima falta de inscripción de embarcaciones que están amarradas en los clubes náuticos o guarderías de la ciudad», reveló la titular de la oficina de ATER en Concepción del Uruguay, Cristina Tanga.
¿Qué impuesto paga una embarcación?
Todas las embarcaciones pagan un impuesto que se abona una vez al año en el mes de noviembre. Las únicas que están exentas son aquellas que tienen un valor inferior a 10.000 pesos.
Respecto al monto que se paga por cada embarcación, Tanga explicó: «Hay una escala de alícuotas según el valor de la embarcación y en función de eso es el monto que debe pagar a la Provincia cada titular».
Un yate, una lancha o un velero pagan valores y porcentajes diferentes. El monto se desprende de un porcentaje del valor declarado de la embarcación.
Evasores
Para fines de mayo de este año, las estimaciones de la Administradora Tributaria de Entre Ríos alcanzaban a unos 40 millones de pesos que no se recaudan por la falta de inscripción de los yates, veleros y otras embarcaciones de valor en la Provincia.
La falta de pagos correspondientes por parte de los dueños de embarcaciones, intenta ser corregido imponiendo un efecto retroactivo a los impuestos. Es decir, aquel que tiene un yate desde 2006 en adelante, deberá pagar los impuestos y los intereses correspondientes de forma retroactiva al año en que compró la embarcación.
La situación es simple de abordar y fuera de micrófono, desde ATER confiesan que es tan simple como «cazar en el zoológico»: alcanza con acercarse con el listado de embarcaciones inscriptas en ATER en una mano y recorrer las cuatro guarderías náuticas de la ciudad para registrar las matrículas de las embarcaciones que no están inscriptas y que por tanto no pagan sus impuestos. En los informes públicos sobre Recaudación que difunde ATER en su sitio web no está discriminado cuánto recaudan anualmente por el impuesto que se cobra a las embarcaciones.
Los controles cruzados con Prefectura Naval Argentina prometen complicar la posibilidad de uso de las embarcaciones para todo aquel que intente salir a navegar y no tenga al día su impuesto provincial correspondiente.
Pero el problema con los dueños de los yates y embarcaciones de lujo no termina ahí. Desde la entidad recaudadora entrerriana reconocen que, incluso en esos 4 de cada 10 embarcaciones que pagan, también hay irregularidades.
La titular de ATER Concepción del Uruguay alertó que «muchas de las embarcaciones que se dan de alta tienen una tasación muy menor al valor real. Y también notamos que los valores que se manejan en las transferencias (cuando se vende una embarcación) son irrisorias».
La funcionaria adelantó que para contrarrestar estas maniobras, desde el organismo «vamos a efectuar controles cruzados para contrarrestar la declaración jurada que hace el propietario» que declara muy por debajo del valor real. Pero eso va a ocurrir, con suerte, el año que viene.