La policía de la Ciudad del Riel logró recuperar elementos robados luego de dos ilícitos sufridos por habitantes de esa localidad. Según se pudo saber, personal policial, tras la denuncia de una vecina de 48 años de edad, quien aseguró haber sido víctima de la sustracción de una computadora portátil, inició de inmediato tareas investigativas.
Este trabajo llevó a solicitar mediante la Fiscalía en turno, el allanamiento para una vivienda de la misma localidad, ubicada en calle Aguet, donde se domiciliaría un menor de edad, que podría tener relación con el hecho.
Es así que el procedimiento se llevó a cabo mediante mandamiento judicial emanado por el Sr. Juez de Garantías en turno, sin poder hallar en la vivienda, elemento alguno de interés para la causa. No obstante ello, minutos más tarde se hizo presente en dependencias policiales la madre del menor, haciendo entrega del elemento mencionado. «Esta computadora era la sustraída a la vecina mencionada, por lo que previo reconocimiento correspondiente, y tras consulta a la Magistratura interviniente», le fue entregada nuevamente a su propietaria.
Se robaron un cordero
Por otra parte en horas de la madrugada de ayer se produjo un robo en una propiedad ubicada en calle Rivadavia, donde desconocidos habrían sustraído el cordero a una familia. Es así que de inmediato personal policial se abocó a una exhaustiva búsqueda en la zona, logrando aprehender a un sujeto, quien se hallaba en cercanías al lugar del hecho, el cual poseía su vestimenta con manchas de sangre, además había restos de un animal en la puerta de su vivienda.
Se informó a la Fiscalía en turno lo sucedido, solicitándose el allanamiento correspondiente para la vivienda y minutos más tarde, mediante mandamiento judicial emanado por el Sr. Juez de Garantías, se realizó la requisa domiciliaria. En el lugar se secuestró un cuero, lana y pezuñas del animal faenado. A continuación se realizaron las diligencias de rigor, hombre de 41 años, el cual fue trasladado a Concepción del Uruguay y alojado en Comisaría Primera, a disposición de la Magistratura interviniente. El hecho fue caratulado como supuesto delito de abigeato y quedó en manos de Comisaría de Basavilbaso.