La equinoterapia es una disciplina con un extenso desarrollo en Entre Ríos, donde hay 23 agrupaciones abocadas a la actividad que esperan contar con una ley que la regule, ya que tampoco hay a nivel país una normativa al respecto.
Agrupaciones de la provincia impulsaron un proyecto de ley de equinoterapia en 2018, que de no ser tratado este año perderá estado parlamentario.
En 2018 se presentó en la provincia un proyecto –cuyo número de expediente 23.052–, que en marzo de 2021 ingresó a la comisión de Salud de la Cámara de Diputados. Sin embargo, quedó estancado su tratamiento, y si no se debate este año en el recinto perderá estado parlamentario.
La iniciativa, impulsada por la diputada Ayelén Acosta, apunta a la regulación “de las terapias asistidas con caballos (equinoterapia) como actividad terapéutica de habilitación y rehabilitación para personas con discapacidad”.
Desde los centros que propician y se dedican a esta práctica señalan que el proyecto tiene dos grandes puntos: el primero es que haya un ente que regule los centros de equinoterapia, estableciendo y controlando diferentes aspectos de la actividad para garantizar que esta disciplina esté a cargo de personal idóneo y autorizado, y en las condiciones que se requieren; y el segundo es que las obras sociales o prestadoras de salud brinden cobertura a sus afiliados que recurran a esta terapia asistida con caballos.
Al respecto, Marcela Manen, referente de la Fundación de Equinoterapia Iko Iko, situada en María Luisa, y coordinadora del grupo de Centros Integrados de Equinoterapia de Entre Ríos (CIDEER), subrayó: “Necesitamos que se trate este proyecto, que se discuta este año para poder ayudar a un montón de gente que realmente necesita acceder a la equinoterapia para mejorar su calidad de vida, gracias a sus numerosos beneficios”.
Sobre este punto, comentó a Uno: “Es una actividad que apunta al bienestar de las personas, sobre todo con alguna discapacidad. Por ejemplo, les hace bien el contacto con el animal, con su calor”.
“Hay muchísima evidencia científica a nivel mundial sobre los beneficios de la equinoterapia, a nivel sensorial y cognitivo, y es muy recomendada. Con el tema de la pandemia hay muchos chicos con hiperactividad con problemas sensoriales y es increíble cómo en cuatro clases el chico ya cambió a partir del contacto con el caballo; pero por supuesto siempre tratado con profesionales, que eso es fundamental”, manifestó.
“El movimiento constante del caballo, que es similar a la marcha humana, ayuda mucho a alguien que está en una silla de ruedas las 24 horas, ya que se siente que va caminando libre; una persona que es no vidente sabe que no se va a chocar con nada cuando va arriba de un caballo entrenado y todo esto ayuda a la autoestima y al bienestar de la persona, que espera con ansias poder montar a caballo, y también de su familia, que advierte las mejoras en cada clase”, destacó la especialista, quien aclaró que quien está a cargo de la terapia debe ser un profesional formado durante años en salud, educación, y conocer de caballos para garantizar una práctica segura. “Hay cursos de tres días y nadie aprende en ese tiempo. Por eso pedimos que se regule la equinoterapia. Es necesario, ya que no queremos que corran riesgo los pacientes, y tampoco que personas irresponsables nos perjudique a quienes estamos trabajando hace años y profesionalmente en esto”, remarcó.
Manen contó que son alrededor de 12 provincias las que cuentan con una ley que regula la actividad en su territorio, y que numerosos países tiene una normativa sobre equinoterapia, habida cuenta de su importancia y su desarrollo. “Incluso Uruguay y Brasil, que son países limítrofes, tienen su ley. En Argentina no hay una legislación que la norme, cuando son más de 250 los centros abocados a esta terapia, que tiene cuantiosos resultados”, concluyó, anhelando que en este 2022 haya avances concretos para que a nivel nacional o provincial se pueda contar, finalmente, con una ley.
Nuevamente se presentó un proyecto a nivel nacional
Aun cuando hay numerosas provincias que ya cuentan con una ley que establezca los alcances de la equinoterapia y a nivel nacional ya se presentaron varios proyectos a lo largo de los años, no existe todavía una normativa que regule la actividad en todo el territorio nacional. En este marco, la diputada nacional que representa a Entre Ríos, Gabriela Lena, volvió a presentar un proyecto, con el apoyo de la Red Argentina de Equinoterapia, que ya había ingresado a la Legislatura en 2020, pero perdió estado parlamentario, según ella misma explicó en FM Litoral.
“La equinoterapia es un método terapéutico que se aplica en la Argentina hace más de 40 años. Sin embargo, no cuenta con un marco legal que la reglamente, le dé visibilidad y reconocimiento como tal. En 2020, con los integrantes de la Red Argentina de Equinoterapia elaboramos un proyecto de ley que perdió estado parlamentario. Ahora vuelvo a presentarlo porque es necesario garantizar el acceso a la terapia de todas las personas que la necesiten y asegurando el bienestar animal”, remarcó la legisladora.
A su vez, destacó: “Los tratamientos con equinoterapia han dado resultados sorprendentes. Hoy para poder acceder a ellos hay que realizar amparos a las obras sociales para que se puedan reconocer. No lo creemos justo, es hora de un cambio”.
“Los beneficiarios de esta ley son las personas con discapacidad, las que se encuadran en la Ley de Salud Mental, y las que hayan recibido prescripción médica para este tipo de tratamiento y las obras sociales deben brindar una cobertura total a estos tratamientos. De esa manera, la prestación quedaría incorporada en pleno derecho al programa médico obligatorio (PMO) y al nomenclador de prestaciones para personas con discapacidad”, expresó, y explicó que “el proyecto contempla además medidas de cuidado y garantiza los derechos y el buen trato a los equinos de acuerdo a las leyes de protección animal”.
Uno.