Funcionan 22 centros de equinoterapia reconocidos que brindan esta actividad, y piden que se avance en el tratamiento de una normativa que la regule.
En Entre Ríos hay 22 agrupaciones de equinoterapia que aguardan contar con una ley que regule la actividad y esperan que pronto se trate un proyecto presentado en septiembre de 2018 en la Cámara de Diputados de la Provincia, que en marzo ingresó a la Comisión de Salud.
En su primer artículo se explica que su objeto es la regulación en el territorio entrerriano “de las terapias asistidas con caballos (equinoterapia) como actividad terapéutica de habilitación y rehabilitación para personas con discapacidad”.
En la descripción de la actividad, se explica que se trata de una “disciplina integral y sumativa de las terapias médicas tradicionales para la habilitación y rehabilitación de personas mediante el uso de un equino apto, certificado y debidamente entrenado, realizado por profesionales capacitados y en lugares destinados para este fin”. Y define como Centro de Equinoterapia a las “entidades destinadas a prestar servicios de Equinoterapia que cuentan con infraestructura física, personal, caballos entrenados y equipamiento idóneo para dicha actividad”.
Micaela Rodríguez, referente del centro El Establo, de Gualeguaychú, y una de las coordinadoras del Centro de Equinotarapia de Entre Ríos, comentó a UNO que esperan que esta norma pueda ser aprobada antes de fin de año, y destacó que la semana pasada visitó dos espacios de equinoterapia el presidente de la comisión de Salud de la Cámara alta, el diputado Jorge Cáceres, para interiorizarse de la labor que llevan adelante: Iko Iko en Aldea María Luisa; y La Delfina, en Oro Verde.
“El proyecto tiene dos grandes puntos. Lo primero que necesitamos es un ente que nos regule como centros de equinoterapia, que establezca y controle por ejemplo cómo tiene que ser la rampa que usamos, qué debe tener, las medidas de la pista con la que trabajamos, con cuántos baños debemos contar, y demás. Que cada centro sea casi un espejo de otro, porque hoy por hoy hay 22 centros en la provincia y la verdad es que todos hacemos lo que consideramos que es lo más importante y necesario para funcionar, pero no hay nadie que nos controle, más allá de que debemos contar con una habilitación municipal”, explicó a UNO.
A su vez, refirió: “Tenemos seguros, pero es complicado conseguirlos, porque trabajamos con animales y también con personas con discapacidad. Cuesta convencer a las aseguradoras de que nos brinden cobertura y que el índice de incidentes en la actividad es casi nulo”. Otro punto que mencionó es que, dentro de los controles, se verifique que cada centro cuente con personal capacitado, ya que “no cualquier persona que tenga un caballo en una chacrita pueda realizar la equinopterapia como tal”, aseguró, y agregó: “Hay que diferenciar de un taller ecuestre, o una vuelta a caballo, de lo que es la equinoterapia puntualmente. Nos hemos enterado de que hay lugares que no cumplen ciertos requisitos de la actividad, y es una pena porque desprestigia esta terapia que nosotros venimos impulsando desde mucho antes de que se presentara este proyecto de ley. Desde el 98 que empezamos a solicitar que nos regulen de alguna u otra manera”.
También procuran que las obras sociales brinden cobertura para este tipo de tratamientos. “Es un punto que se pide y está incluido en el proyecto. Es importante que Iosper, que es la obra social del Estado, nos incorpore. Hay algunas prepagas que actualmente sí están cubriendo este tratamiento, pero con otras estamos en la lucha, con amparos y demás. Es un tema engorroso, sobre todo para los padres, que deben luchar para que los hijos puedan acceder a beneficios”.
Por su parte, Marita Schonals, titular de La Delfina, remarcó su agradecimiento por el interés de los legisladores por esta iniciativa y que Jorge Cáceres haya visitado su establecimiento. Y también destacó que el viernes mantuvieron una reunión vía Zoom junto a diputados de los diferentes bloques. Sobre este punto, desde Equinoterapia Entre Ríos publicaron en su Fanpage: “Esto nos aviva la llama de la lucha por nuestra ley. Todos saben que venimos persiguiendo este objetivo desde 2017, donde redactamos el proyecto y a partir de 2018, que fue presentado por la diputada Ayelén Acosta, quien nos acompaña desde el primer día”. Entre los principales beneficios de la equinoterapia, se recalcan los avances físicos que consiguen quienes practican equinoterapia, se destacan la mejora del equilibrio, el control de la postura, el fortalecimiento del tono muscular, la coordinación neuromotora y orientación, el espacio temporal y la lateralidad, mejora de la percepción del esquema corporal. También se producen numerosos beneficios psicológicos, como el aumento de la autoestima, la confianza y de la autoconfianza; la estimulación de la atención, la concentración, la comunicación y el lenguaje y el desarrollo del autocontrol.