Enersa aseguró que no habrá cortes de electricidad, aunque aclaró que el normal abastecimiento dependerá del nivel de consumo de los usuarios, pero claro está que los operadores del sector estiman que los incrementos tarifarios dispuestos a principios de año, sumados a los que se aplicarán en forma escalonada a partir de enero, tendrán un efecto en el comportamiento de los usuarios.
Para el presidente de Enersa, Alfredo Muzachiodi, serán fundamentales para afrontar esta época las obras y las adecuaciones que se vienen realizando desde principio de año. «Hicimos los trabajos necesarios para tener un verano con normalidad. Aunque no hay una garantía total porque se pueden presentar una serie de situaciones, desde la provisión de la energía que no puede ser la que se está demandando, como cuestiones que atañen al equipamiento hasta la temperatura y las inclemencias climáticas», apuntó.
Muzachiodi destacó a UNO que «en condiciones normales Enersa debería prestar un buen servicio y para eso nos hemos preparado», pero el equilibrio será entonces el resultado de la combinación del ahorro en el consumo, inducido en parte por el aumento de las tarifas, y de la puesta en marcha de equipos de energía térmica y renovable, a partir de los proyectos licitados en los últimos meses.