En la mañana del viernes se realizó una nueva edición de la manifestación ambiental de los estudiantes. El Grito Blanco es organizado por la Asamblea Ambiental, y año a año se renueva con un mensaje claro: «No a Botnia, Sí a la Vida».
Las escuelas participaron con carteles, poesías, canciones y hasta investigaciones. Escuelas primarias y secundarias se sumaron a la nueva edición del Grito Blanco, organizada por la Asamblea Ambiental. Se trata de una jornada participativa de educación ambiental, que busca concientizar y dar a conocer la lucha contra la pastera UPM, ex Botnia y además, informar sobre la importancia del cuidado del agua, el aire, la tierra y todo nuestro ecosistema. Los distintos grupos de estudiantes subieron al escenario y recitaron sus poemas, dieron su reflexión, o hasta ofrecieron una canción, como Brisa, una alumna del Instituto Nuestra Señora de Guadalupe. «Por la sombra de mi tierra, por los peces de mi río, por la flora que no habla, escuchen nuestro río», expresó un grupo.
«Ya basta, queremos y protegemos a la Madre Naturaleza. Somos la Escuela Nº 21 Esteban Piaccenza del Potrero y los invitamos a decir fuerte y con mucha energía `Basta ya de contaminación. Sí a la Vida, no a las papeleras'». «Dios perdona, el Hombre a veces, pero la Naturaleza nunca. Llamamos a la reflexión, queremos un ambiente limpio», sostuvo otro grupo de estudiantes. En tanto, un grupo de la Escuela Técnica Nº 3, 15 de noviembre, manifestó que habían realizado una «breve investigación, para conocer las razones de esta manifestación llamada Grito Blanco, que se realiza desde el 2005. A través de la información que encontramos y después de la puesta en común del trabajo, reconocemos la necesidad de unirnos a la lucha, por nuestro futuro y porque queremos que se cumplan nuestros derechos de vivir dignamente».