El delantero se entrenó diferenciado, pero llegaría para el decisivo duelo en el Monumental, donde estará en juego el pase a la final de la Copa Sudamericana.
El delantero Andrés Chávez realizó esta mañana trabajos diferenciados por una molestia muscular aunque estaría presente en el Superclásico del jueves ante River en el Monumental en busca de la final de la Copa Sudamericana.
El chileno José Fuenzalida asoma como el principal candidato a ocupar la zona ofensiva de la banda derecha que dejó sin dueño el lesionado Juan Manuel Martínez en el choque jugado en La Bombonera.
El Burrito sufrió un esguince de tobillo que lo marginará el resto del torneo y ante ello, Fuenzalida le da a Boca la versatilidad para jugar por todo el andarivel derecho, como volante o delantero y de necesitarlo hasta como lateral.
Boca comenzaría con un 4-4-2 aunque con el chileno podrá tener una rápida conversión a 4-3-3.
Por eso, aunque Rodolfo Arruabarrena no hizo confirmación alguna en el entrenamiento en la lluviosa mañana en el predio Pedro Pompilio, Fuenzalida gana terreno respecto de Emmanuel Gigliotti.
No fue casual que Jonathan Calleri, ni bien anotó su segundo gol en la victoria de ayer sobre Independiente 3-1 fue reemplazado por Luciano Acosta, para darle descanso al titular.
En tanto, Chávez tiene una molestia en la parte posterior del mulso izquierdo y hoy fue probado ante la mirada del médico Gerardo Godoy y de uno de los kinesiólogos del plantel.
El equipo iría al Monumental con Agustín Orión; Leandro Marín, Juan Forlín, Daniel Díaz, Nicolás Colazo; Fuenzalida, Mercelo Meli, Cristian Erbes, Fernando Gago; Jonathan Calleri y Chávez.
El entrenamiento consistió en ejercicios regenerativos para los que jugaron ante Independiente en tanto otro grupo hizo un táctico.
La práctica de mañana será a puertas cerradas, y seguramente Arruabarrena parará el equipo que enfrentará a River el jueves desde las 20.45.
Fuente: DyN