A los 57 años, el español festejó en autos con el Mini. Brabec, Casale, Karginov y Currie, el resto de los consagrados. Terranova, los hermanos Benavides, Caimi, Andujar y el Pato Silva, los destacados argentinos en Arabia.
Carlos Sainz continúa alimentando su leyenda. El Matador, a los 57 años, volvió a dominar un Rally Dakar, esta vez por primera vez en Arabia Saudita, al mando de un Mini de tracción simple del equipo X-Raid, y sumó su tercer lauro con una marca diferente. En el 2010, el madrileño había alcanzado su primer halago con un Volkswagen Touareg. La victoria la repitió en el 2018, a bordo de un Peugeot 3008 DKR. Y ahora consiguió el tricampeonato con el buggy de Mini, vehículo que se encargó de desarrollar y que conoce a la perfección.
“Estoy muy contento. Gracias a Lucas (Cruz, su navegante), al equipo. A toda la gente que me apoya, a todos los fans, a la familia, por supuesto. A Red Bull, a Bahrein. Ha sido un rally muy difícil, desde el inicio, con mucho riesgo, al máximo los tres y estoy muy contento con esta victoria”, comentó el Matador.
Nasser Al-Attiyah, con la Toyota Hilux, se impuso en la última especial de 167 kilómetros y se aseguró el subcampeonato, a poco más de seis minutos de Sainz, mientras que Stéphane Peterhansel, con el otro buggy Mini, llegó tercero, a diez minutos.
Entre los argentinos, Orlando Terranova selló una gran competencia con un sexto puesto. El mendocino se mantuvo siempre dentro de los seis mejores de la carrera y completó la vuelta con el Mini 4×4, a 1h12m15s del español.
Mauro Lipez, navegante del ecuatoriano Sebastián Guayasamín, fue 43° con la Chevrolet Trail Blazer, en tanto que Facundo Jatón, copiloto del español debutante Pablo Canto Martínez a bordo de una Toyota Hilux, arribó en el 50° lugar.