Está previsto que la ceremonia de jura comience a las 11 en el Congreso. El mensaje allí será breve. Los detalles los brindará al público. Pretende detallar la herencia recibida. Las iniciativas centrales que enviará al Congreso.
Empiezan a definir los pormenores de la asunción de Javier Milei como presidente el próximo domingo. En su primer discurso como mandatario, apuntará a detallar «la herencia recibida» y «administrar las expectativas» del cambio que promete llevar adelante su nueva gestión.
Está previsto que dentro del Congreso -donde jurará y recibirá los atributos de mando de parte de Alberto Fernández- brinde un mensaje breve. El plato fuerte será el acto en la calle, frente a la multitud.
Asunción breve
Está previsto que la ceremonia de jura comience a las 11 en el Congreso. Ahí mismo se espera que el presidente saliente, Alberto Fernández, entregue los atributos de mando: el bastón y la banda. La vicepresidenta Cristina Kirchner tiene que tomarle juramento a su sucesora, Victoria Villarruel.
«Ahí dará un mensaje a la asamblea legislativa. Pero lo relevante que quiere enfatizar el presidente es lo que va a decir a la gente convocada afuera, delante del Congreso», consideró el ex canciller macrista Jorge Faurie, quien bajo el mando de Diana Mondino está encargándose del protocolo de la ceremonia.
Después partirá a la Casa Rosada, escoltado por granaderos a caballo. Ahí saludará a las delegaciones extranjeras y le tomará juramento a sus ministros.
Más tarde va a participar del Tedeum, una misa de acción de gracia, en la Catedral que tendrá caracter «interreligioso». Habrá oraciones católicas, del judaísmo, musulmanes y protestantes. Entrada la noche, será la función especial en el Teatro Colón.
La herencia, eje del discurso
Milei lo había prometido. “Vamos a ser muy explícitos respecto de lo que es la herencia; les vamos a contar a los argentinos con lujo de detalles el desastre que deja plantado este Gobierno que, encima, ni siquiera da la cara de hacerse cargo por los daños causados”, declaró días atrás.
Hará un planteo con números y explicaciones, proveniente de la información que ya tiene, más los primeros datos que están recibiendo sus equipos de trabajo en las reuniones de transición.
«La bomba de leliqs» lo obsesiona al punto que fue la clave para elegir a Luis «Toto» Caputo, experto en finanzas, como ministro de Economía. Milei pronostica que si eso no se resuelve de una buena manera lleva a una hiperinflación.
Otra cuestión que consideran clave será hacer hincapié en que no va a ser fácil y que la inflación va a tardar en bajar. «Plantear que ni el Banco Central se va a cerrar el 11 de diciembre ni la dolarización va a ser el 4 de enero», sintetiza un hombre de su equipo, según el diario Clarín.
Milei buscará apuntar cuáles son los momentos y bajo qué escenarios podría cumplir con cada promesa de campaña. No quiere que el contrato electoral con sus votantes se vea dañado. Esta estrategia ya la viene esbozando en declaraciones a los medios en la que planteó un escenario catastrófico.
«Están sentadas las bases de una hiperinflación que la de Alfonsín era un porotito», aseguró sobre el tema de mayor impacto social, a la par que vaticinó que «va a haber una estanflación».
«El reordenamiento fiscal te va a impactar negativamente en la actividad económica. Por eso digo que la única billetera abierta es la de Capital Humano para dar contención a los caídos», afirmó. A su vez, consideró que si las cosas salen bien, la baja de inflación podría empezar a verse entre los 18 y 24 meses.
Algunos consultores políticos consideran que es parte de la estrategia de preparar a todos para lo peor y que después, si el panorama termina siendo menos grave, se vea como un logro.
El libertario ya repitió varias veces que «todos los que estén dispuestos a abrazar las ideas de la libertad son bienvenidos».
Paquete de leyes
La jornada inaugural de su Presidencia también significará para Milei sentar las bases de las principales reformas que se plantea su administración. “Asumimos el 10 y el 11 mandamos los proyectos”, aseguran en su entorno más próximo. A falta de mayoría en ambas cámaras del Congreso y tras haber nominado a Martín Menem y Francisco Paoltroni para presidir Diputados y la provisional del Senado respectivamente, la apuesta libertaria apunta a aprovechar el contundente envión de las urnas para ejercer presión sobre legisladores de otras fuerzas en favor de la sanción de sus iniciativas.
Con ese objetivo el electo mandatario convocará a sesiones extraordinarias y ya alista el paquete de leyes o «ley ómnibus», que pretende que se debata en forma urgente.
“Cuando ingresemos al Gobierno vamos a llamar a sesiones extraordinarias, vamos a mandar todas las leyes para desregular la economía, cambiar la estructura tributaria, modernizar el mercado laboral y hacerlo más flexible”, anticipó días atrás el propio líder libertario.
Respecto al contenido de ese paquete de iniciativas (aún no de definió si será en la modalidad de ley ómnibus o iniciativas por separado), desde el campamento libertario afirman que se trabaja en una profunda reforma del Estado con la privatización de empresas públicas, la reformulación de la ley de ministerios, una serie de modificaciones clave en la legislación laboral vigente, la desregulación de diversos sectores económicos, y la implementación de cambios de fondo en materia impositiva.
Además, según fuentes cercanas al Presidente, como parte de ese paquete también se incluirá una reforma política-electoral, que podría contemplar cambios en el sistema de financiamiento de los partidos políticos y la eliminación del mecanismo de las PASO, entre otras medidas.