Los acusados son cuatro jóvenes que residen en Capital tres de ellos y el restante en Lanús, provincia de Buenos Aires. Fue elevada a juicio este martes, la causa por las pintadas del coche motor de la empresa Materfer, que fueran realizadas por un grupo de jóvenes, en octubre del 2013, cuando la formación se encontraba en la estación de trenes de Concepción del Uruguay.
La audiencia fue presidida por el juez de Garantías N° 2, Guillermo Tomás Rojas, con la presencia del fiscal Mario Schereiner; los jóvenes imputados Agustín Nicolás Ruecco, Alexis Exequiel Duarte, Gianfranco Lionel Duarte y Matías Reggina, que se los acusa del delito de «Daño agravado a bienes del estado», lo que son representados por el doctor Leandro Luis Ferrando quien se indicó que «se encuentra debidamente notificado de la misma, obrando cédula agregada al presente legajo».
Quien hizo uso de la palabra fue el fiscal Schereiner, quien detalló que en la madrugada del 13 de octubre de 2013, los jóvenes procesados, en forma conjunta y en base a un plan previamente establecido realizaron cuatro graffitis en la formación, dañando de esta forma el lateral del vagón del coche motor de la empresa MATERFER que daba al norte, cuando el tren se encontraba en la estación de Concepción del Uruguay a la espera de su salida con destino a Paraná. Los graffitis decían REAL, DENISEE, SAPA y KHALI y REY AFULS, conducta, que encuadra en la figura típica del delito de Daño a bienes del Estado (art. 184, inc. 5 del CP). Tras el alegato del fiscal, el juez Rojas dispuso la remisión a juicio, destacándose que tres de los imputados fijaron sus domicilios en la ciudad autónoma de Buenos Aires, en tanto que el cuarto lo hizo en Lanús, provincia de Buenos Aires.