“Será de largo aliento”, anticipó Marcos Schiavi, titular de la Dirección Electoral. Además, explicó que eso se debe a la cantidad de categorías en juego en varias provincias.
El escrutinio de los votos de las próximas elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) será de “largo aliento”, según lo anticipó el propio titular de la Dirección Nacional Electoral (DINE), Marcos Schiavi.
Pese a que en 2021, en las elecciones de medio término, los resultados fueron comunicados entre las 21 y las 22, cuando ya había un alto porcentaje de votos escrutados, el escenario asoma distinto este año. La cantidad de categorías en juego, especialmente en el estratégico territorio bonaerense, que concentra casi el 40% del padrón electoral, sumado a la combinación mixta que mostrará la Ciudad de Buenos Aires al momento de votar, complejizan el escenario y podrían generar demoras. Según pudo saber este diario, los apoderados de los partidos políticos ya fueron puestos al tanto de esta posibilidad.
“Es posible que esa noche nosotros tengamos un conteo de largo aliento porque es una elección más compleja que en 2021, en términos de que tenemos más cantidad de categorías para contar. En 2021 había tres categorías en algunos casos, en otras se votaba solamente diputados. Y en este caso tenemos como mínimo cuatro categorías: presidente, Parlasur por dos y diputados, llegando a ocho categorías como en la provincia de Buenos Aires”, describió Schiavi, en referencia a las boletas para gobernador, legisladores provinciales, intendentes y concejales y consejeros escolares.
“No me imagino dando un resultado en donde la provincia de Buenos Aires no tenga escrutado algo que sea representativo. Lo mismo para la ciudad de Buenos Aires, que entre ambas concentran casi al 50% del padrón”, completó.
Además de la complejidad en la ciudad y la provincia de Buenos Aires, se espera que Catamarca, Entre Ríos y Santa Cruz sean más lentas que el resto de los distritos, porque votan más categorías.
El escrutinio de las elecciones de 2021 no tuvo mayores demoras, pese a que estuvo condicionado por la pandemia de Covid-19. En las últimas semanas, la DINE -que estaba bajo la órbita del Ministerio del Interior y hace tres semanas pasó a la Secretaría General de la Presidencia- realizó una prueba y un simulacro “que fueron exitosos”, indicaron. Se pudo probar la transmisión y el recuento. “Transmitimos 104 mil telegramas desde 12.000 establecimientos y los contamos, estamos bien”, completó el hombre cercano al ministro Eduardo de Pedro y que hoy trabaja bajo la órbita de Julio Vitobello.
Atentos a las diferencias entre ambos procesos, para estar a la altura de la demanda de este escenario electoral, se reforzaron dos puntos centrales del sistema: “En términos del recuento, pasamos de 1200 digitadores a 1800, que van a estar en dos lugares y además de eso nosotros vamos a transmitir desde 12 mil lugares de votación, lo que da más del 90% de las mesas se transmitirán de los propios establecimientos”.
Pese a eso, Schiavi reconoce que habrá que tener “paciencia”, en lo que serán las horas posteriores al cierre de los comicios. “Todo el trabajo se hizo para tener un resultado rápido y confiable, pero después la oferta electoral determina y es de un nivel de complejidad muy alta. Entonces, eso tiene una traducción en que, en la provincia de Buenos Aires, un telegrama tiene tres páginas. Llenar un telegrama y un acta de tres páginas ya es complejo, y luego también es complejo contarlo”, detalló sobre uno de los problemas centrales.