Después de un periodo de cierre por la detección de un caso positivo de COVID-19, ServiAve retomó sus actividades con negociaciones por salarios adeudados. Un día reclamaron parando la actividad y reactivaron las tareas tras un acuerdo. La empresa pagará con un aporte del gobierno nacional.
La planta frigorífico de San Justo, departamento Uruguay, permaneció cerrada sin actividad tras detectarse un caso positivo de COVID-19 en uno de sus trabajados, tras ese periodo de aislamiento vuelve a faenar aunque con conflictos laborales. Los trabajadores reclamas el pago de la totalidad de sus salarios.
Con días de negociaciones desde el inicio de semana en el frigorífico ServiAve, se llevó a cabo una asamblea de trabajadores, donde fue solicitado al empleador -Domingo Leopardo- el pago completo de la última quincena.
Al respecto, se supo que delegado de la planta, habría dado a conocer que el empleador se había negado a pagar los días no trabajados y que únicamente abonaría los dos días que se pudo obrar previos al cierre. Además habría decidió unilateralmente suspender la faena hasta nuevo aviso y solicitó, con ayuda del Jefe Policial, la retirada de los empleados de la planta.
Finalmente, este jueves el frigorífico ubicado en San Justo, abrió sus puertas. El dueño de la empresa, Domingo Leopardo indicó que se efectuó el pago luego de negociaciones con el sindicato de la carne. Destacó que los trabajadores solicitaban el pago de la quincena que estuvieron parados por la cuarentena obligatoria que se estableció en San Justo.
Destacó que el mismo se pudo llevar a cabo por el aporte del gobierno nacional. Leopardo aseguró que esto no habría sido posible sin este aporte, ya que la empresa no trabajo por 14 días.