El técnico mexicano descargó su bronca contra el delantero holandés. Mirá la reacción del Caruso azteca.
El alterado entrenador mexicano, Miguel Herrera, asombra al mundo por sus alocados festejos y su efusividad. Tampoco pasó desapercibido en la polémica y ajustada derrota de su seleccionado ante Holanda.
El Caruso Lombardi azteca sumó una nueva a su catálogo de locuras al empujar al delantero holandés Robin Van Persie, quien se encontraba reclamándole un fallo al árbitro portugués Pedro Proença.
Luego del partido Herrera, dijo en conferencia de prensa que el arbitro inventó el penal de la victoria holandesa y que los europeos recibieron ayuda para clasificar.