El cambio climático no es lo mismo que el calentamiento global. Este último es solo una consecuencia del primero. Éste es la alteración del clima causado por la actividad humana el cual produce grandes daños en el ecosistema y en sus habitantes, sin importar si son personas o animales Este fenómeno de la naturaleza causado por el hombre ha extinguido muchas especies y está poniendo a otras e peligro de extinción.
Este influye y mucho en nuestras mascotas ya que pueden ser víctimas de patologías respiratorias como así también otras afecciones tales como:
Crece el número de parásitos pues tanto pulgas como garrapatas siempre buscan un lugar caliente para estar, de ahí que se sumerjan en el cuerpo de animales para subsistir. Pero si además del cuerpo, el exterior está también caldeado, esto favorece enormemente a su supervivencia y desarrollo. Esto significa que, además, al desarrollarse tan rápidamente, su tamaño es menor y más difícil de identificar.
Por otra parte el número de mosquitos aumenta. Al igual que a los parásitos, a estos les gusta el calor y se reúnen en los charcos. Las inundaciones y el calentamiento global hacen que los mosquitos sean una colonia gigantesca que propaga un sinfín de enfermedades a nuestras mascotas, como la del gusano del corazón.
El calentamiento global ocasiona temperaturas muy altas que fácilmente puede hacer que tu mascota sufra un golpe de calor que le lleve a tener complicaciones más graves.
La muda de pelo del perro es otra aflicción. Esta es una adaptación a las condiciones climatológicas cambiantes. La realizan en los cambios de estación, la cual es más intensa en primavera y otoño. El cambio climático está suavizando la diferencia entre estaciones por lo que la muda no se realiza sólo en primavera y otoño, en este momento los perros están prologado el cambio de pelo durante meses.
La inestabilidad del clima hace que nuestras mascotas sean más vulnerables a padecer patologías respiratorias, haciendo que se “resfríen más”. Estos resfriados son cada vez más comunes. Los síntomas son parecidos a los nuestros: su mascota estornuda, tiene mocos, tose, le lloran los ojos y está decaída. Estas infecciones respiratorias están causadas por virus y bacterias que proliferan con comodidad en un entorno de temperaturas más elevadas de lo normal.
Más allá de nuestros animales los caballos sobrellevan cambios y estos son consecuencias también de los cambios ambientales. Científicos argentinos y españoles analizaron la morfología en esta especie en los últimos 18 millones de años y la información podría ayudar a predecir consecuencias del actual clima En un reciente artículo publicado en la revista científica Science, se demostró que las variaciones en el tamaño y la dieta de éstos en los últimos 18 millones de años, fueron consecuencia de cambios en el clima y la geografía. Tal como se exhibe en la mayoría de los museos del mundo, los caballos simplemente se hicieron más grandes con el tiempo y pasaron de ser unos pequeños mamíferos que se alimentaban de arbustos en los bosques, a los esbeltos caballos actuales que pastan en las llanuras abiertas.
En definitiva, muchas veces no sobredimensionamos la importancia que radica en el cuidado de nuestro mundo, nuestro hábitat, nuestro espacio, nuestros animales, lo nuestro. ¿Alguna vez nos hemos puesto a reflexionar que por el solo tirar spray indiscriminadamente a la atmósfera, usar bolsas de polietileno o no tener conciencia en reciclar puede alterar una especie, puede perjudicar a nuestros seres no humanos queridos, puede metamorfosear una especie? Tan solo un detalle inconmensurablemente – y algunas veces – trágico. –
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