El Directorio de la autoridad monetaria se reunió al mediodía y decidió la drástica medida, la cual indicó la suba de la tasa de interés de 81% a 91%, incluida la de los plazos fijos.
El ajuste en las tasas será el segundo en apenas una semana: tras conocerse que la inflación de marzo trepó al 7,7%, el Banco Central aplicó un aumento de 300 puntos básicos en el interés que pagan los plazos fijos minoristas, para llevarlo al 78%.
La escalada del dólar que se dio esta semana aceleró la magnitud del alza. La tasa de interés tendrá un incremento de diez puntos porcentuales o, como dicen en la jerga financiera, 1000 puntos básicos, muy superior a la esperada.
Ahora, la inestabilidad en el mercado de cambios lleva al organismo a aplicar un aumento más significativo, de 1.000 puntos básicos. El Directorio del Banco Central aplica los cambios en la política monetaria, como por ejemplo fijar la tasa de referencia.
También se modificaría el monto máximo de plazo fijo alcanzados por la tasa mínima que están obligados a pagar los bancos: de $10 millones a $30 millones.
La medida fue anticipada por el Central a los bancos mediante el sistema Siopel.
La tasa efectiva anual, que estaba en de 119,4%, sube hasta cerca del 141%.
«El Banco Central de la República Argentina informa que desde el día 27.04.2023 la tasa para las operaciones de pases pasivos a 1 día hábil de plazo es de 85% mientras que para las operaciones activas a 1 día hábil de plazo es de 110%», difundió la entidad.
La entidad monetaria venía aplicando los incrementos en las tasas en las primeras reuniones (siempre se hacen los jueves) después de conocerse el dato de inflación.
Así lo hizo el jueves de la semana pasada, cuando elevó la tasa de 78% a 81%, 300 puntos, después de que el INDEC difundió el 7,7% de inflación de marzo.
Pero la intensificación de la crisis financiera impidió esperar hasta el 12 de mayo próximo, que es cuando está previsto que se informe la inflación de abril.
Y así se darán dos subas de tasas en 7 días, que totalizan 13 puntos porcentuales.
La última vez que la tasa había pegado un salto de casi 10 puntos fue el 11 de agosto de 2022, cuando pasó de 60% a 69,50%, en medio de la crisis que generó la salida de Martín Guzmán del Ministerio de Economía.