Una delegación integrada por docentes y miembros de la Cooperadora del Colegio del Uruguay, mantuvieron una entrevista con el Vicerrector de UADER, Juan Bózzolo, a quien entregaron un petitorio.
Entre otras cuestiones solicitaron «el pago inmediato de los haberes atrasados a todos los docentes afectados, en algunos casos con demoras de más de un año y solución definitiva de los conflictos administrativos que retrasan la designación y los pagos del personal, como así también la inmediata y regular entrega de recibos de sueldos de cada mes». En este sentido, los trabajadores indicaron que «no comprenden cuál es el motivo de esa demora, que les acarrea múltiples inconvenientes, ya que reciben los recibos con varios meses de atraso» y «impide efectuar reclamos a tiempo».
Además solicitaron «el reconocimiento de la jerarquía histórica y académica del Colegio del Uruguay con una normativa institucional y administrativa acorde a un establecimiento de enseñanza secundaria y con el reconocimiento de análogos derechos del personal que realiza esta actividad en el nivel y en el ámbito provincial». Hicieron hincapié también en la necesidad «que se convoque a concurso para cubrir los cargos directivos y de conducción que están sin cubrir o cubiertos sin concurso, tal cual era el compromiso asumido oportunamente por las autoridades de FCyT-UADER y que se realicen en el establecimiento». De igual manera solicitaron que «se convoque a concurso para cubrir los proyectos institucionales y los talleres a los efectos de garantizar que no se pierda ninguna hora cátedra en el Colegio.
De acuerdo a lo establecido en el Proyecto Educativo Institucional y a los compromisos establecidos en el acta de la reunión de Jefes de Área, de fecha 22 de abril del corriente. Que se de tratamiento, se apruebe de inmediato y se ponga en vigencia el régimen de concurso propuesto por los docentes del Colegio». Piden además «la aprobación del proyecto y puesta en funcionamiento, en forma urgente, del Consejo Académico, con competencias y atribuciones propias tal como fuera elevado en 2013 y posteriormente en marzo de 2014. Desde la Cooperadora se solicitaron «aportes económicos regulares y suficientes para garantizar el normal desenvolvimiento de la Institución en cuanto a limpieza, mantenimiento, reparaciones, mobiliario, papelería, tizas, insumos informáticos, entre otros».