Esta fecha se instauró en el año 1973 durante el Congreso Mundial de Pediatría celebrado en nuestro país, en conmemoración a la fundación de la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) el 20 de octubre de 1911.
La pediatría es una de las profesiones médicas más vocacionales que existen actualmente, y dichos especialistas no sólo velan por la salud de sus pequeños pacientes sino que llegan a formar parte importante de su núcleo familiar.
Consultada al respecto, la directora del hospital del Niño Jesús, doctora Cristina Alabarse, expresa: “Antes que nada quisiera saludar a todos los pediatras de nuestra provincia y de nuestra institución, que están trabajando arduamente a pesar de la situación de pandemia que estamos atravesando. Cuando una se pregunta el por qué eligió esta especialidad, muchas veces la respuesta la puede ir encontrando en el día a día. El pediatra no sólo es un médico que ve al niño y cura una patología, sino que además acompaña a la familia del niño respecto a su enfermedad y en todos los niveles”.
Y añade: “Muchas veces sentados en un escritorio, terminamos escuchando más la problemática del entorno familiar que la causa por la cual consulta el chico. Porque la familia lo integra al pediatra dentro de su grupo y terminamos hasta siendo consejeros. La pediatría es una especialidad muy linda en cuanto a lo que se brinda pero también en lo que se recibe. Sentir que cuando llegamos al consultorio un niño viene y de golpe nos abraza, o nos manda sus saludos para un día como hoy, es como una caricia al alma”.
Cómo están trabajando por la pandemia
La directora cuenta que desde el efector están asistiendo y dando prioridad a todos los pacientes cuyas patologías le generen un compromiso serio de salud.
“Sin embargo, eso no quiere decir que no se atienda a los otros pacientes, por ejemplo: en la Emergencia puede ingresar un niño con sospecha de COVID-19, uno con politraumatismo, o incluso con deshidratación por diarrea o vómito. Pero se da mayor prioridad a los pacientes con sospecha o confirmación de COVID-19”, detalla.
Y explica que, si bien es cierto que el coronavirus no es tan fuerte en los niños como en los adultos, desde el hospital se organizaron para brindar atención de dos formas: la asistencia personal, por un lado, y el acompañamiento o seguimiento por teleconferencia, por otro.
La teleconferencia es permanente con los papás de niños con patologías crónicas o con tratamientos paliativos. En estos casos, el acompañamiento lo hace todo el equipo porque es un gran número de profesionales el que los asiste.
Respecto a la frecuencia en las consultas virtuales, comenta que eso depende de la situación de los pacientes; hay quienes tienen teleconferencias una a tres veces por semana, y quienes sólo necesitan un control cada 15 días. Y en este sentido, subraya que los medicamentos para los pacientes con cáncer, epilepsia, o del programa de Endocrinología, siguen entregándose de forma pautada en el hospital.
“Por otro lado, nuestra institución organizó toda una planta con salas de área clínica, de cuidados intermedios, y un espacio dentro de la Unidad de Terapia Intensiva para el ingreso de pacientes con sospecha o COVID-19 positivo”, resalta.
Actualmente, los turnos se pueden obtener a través de Salud Escucha (0800-4444-999) o también mediante el Consultorio Virtual de cada servicio.
“El compromiso que se va poniendo en el día a día, tanto en las guardias que es un área crítica porque por allí ingresa una gran cantidad de nuestros pacientes más delicados, como en el resto de servicios, es muy grande. Esto se puede lograr gracias a la ayuda permanente y el soporte que nos da el Ministerio de Salud y el SIPROSA”, cierra Alabarse.
Ministerio de Salud